Famoso desde la cuna: Octavio Gómez una gloria del boxeo tepiteño

MÉXICO D.F., 27 de julio del 2014.- A Octavio ‘El Famoso’ Gómez la fama no le gustó. “Era una cárcel, todos los días a todas horas había alguien buscándome para una cosa o la otra, para pedirme dinero o para ir a no sé dónde. No era libre para hacer lo que me gustaba, por eso agarré el chupe”, confiesa.

Con un destino de fama augurado por la partera “que hizo el trabajo de sacarme de la panza de mi jefa”, con base en la fecha de su nacimiento (30 de marzo de 1944) y la hora, “me vio y dijo: ‘este niño nació para hacer algo notable, cuídenlo’, desde pequeño fue conocido con el sobrenombre que su papá le dio, en concordancia con lo previsto por la señora que lo ayudó a nacer.

Como muchos en el barrio de Tepito, Octavio Gómez admiraba a Raúl ‘Ratón’ Macías, “ídolo de señoras, viejitas y todos aquí, era una gran persona” y fue a buscarlo al enterarse que jugaba frontón cerca de su casa.

“Yo tendría unos once o doce años y me trató tan bien, que me dejó impresionado. Quise dedicarme al box y la primera vez que pisé un gimnasio, dije ‘de aquí soy’ ”, recuerda en entrevista con Quadratín México.

Fue entonces cuando empezó a entrenar con su primer y gran maestro de box, Efrén Rubio, cuya técnica “era muy difícil y no a cualquiera le salía; importaba mucho la concentración y dominar las emociones, había que controlar el ego”, relata.

“Uno nunca olvida a la persona que le hizo tanto bien”, asegura con nostalgia y respeto.

Así llegó a pelear más de cien peleas como amateur y a ser seleccionado nacional para la Olimpiada de Tokio en 1964, cuyo boleto perdió por una noche en que se le pasaron las copas.

“Nos dejaban salir el fin de semana del lugar donde nos tenían concentrados y se me hizo fácil irme de fiesta. Tomé de más y llegué tarde y al otro día no me podía levantar. Me sacaron del equipo”.

Entonces decidió pelear profesionalmente e hizo su debut en la Arena Coliseo en 1964 a la edad de 20 años.

Tras 27 años de carrera boxística, ‘El Famoso’ se retiró del ring pero siguió en los escenarios donde ya había participado como actor de cine y teatro. Fue miembro de la Asociación  Nacional de Actores (ANDA)  y escribió obras de teatro.

Tepiteño de “coraza”, Octavio ‘El Famoso’ Gómez asume como un reto personal entrenar a las nuevas generaciones del barrio donde creció y alejarlas de falsos ídolos como los jefes del crimen organizado cuya actividad, a decir del ex boxeador, despuntó en tiempos de la llamada guerra contra el narco.

Del otrora “semillero de campeones” que fue Tepito, hoy entre sus alumnos tiene “pocos peleadores pero efectivos”, pues contados son los que tienen la habilidad y la fuerza para ser peleadores; sin embargo, confía en que “a lo mejor en unos años ya tenemos a alguien”.

Mientras rememora su vida da cátedra de boxeo: enseña cómo tirar correctamente un golpe o cómo esquivarlo. Se trata de una rutina que se asemeja más a un baile que a un ejercicio. La clave está en el equilibrio, asegura.

“Lo que yo hago es para trabajar la vida, es lo que hacemos aquí”, afirma.