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CIUDAD DE MÉXICO, 22 de marzo de 2017.- El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, aseguró que de aprobarse la Ley de Seguridad Interior, en dos años podría tener en su estado una policía local fortalecida y calificada para que el Ejército pueda salir de la entidad.
Lo anterior lo dijo en conferencia de prensa luego de la reunión que sostuvo con diputados integrantes de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), así como de las Comisiones de Gobernación y de Seguridad Pública en San Lázaro y los gobernadores de Sinaloa, el priísta Quirino Ordaz Coppel y de Tamaulipas, el panista Francisco García Cabeza de Vaca.
“Dos años, ese es mi plazo para que me haga cargo plenamente de la seguridad pública de mi estado, como lo mandata la ley, hablo por Michoacán, no quiere decir que eso sea para todos. Pero en Michoacán, a mi denme dos años a partir de que se apruebe la Ley y se establezca el transitorio y todo, dos años, ese es mi plazo para que el Ejército se retire a los cuarteles”, enfatizó.
Indicó que existen diferencias entre los estados por lo que no serían los mismos plazos para los del norte, centro o sur, pero que no se trata tampoco de entrar en una zona de confort donde se llame al Ejército en cuanto se complique la situación.
“De acuerdo a las circunstancias de las entidades serían los plazos, para que no entremos todos en la zona de confort y decir, ‘al cabo si se complica viene el Ejército o la Marina y nos lo resuelve’, no puede ser la dinámica, es por el bien del país el que se deba plantear la permanencia del Ejército”, sostuvo.
Sin embargo, Aureoles Conejo reconoció que existe confusión en el tema pues se piensa que se quiere una Ley para la actuación de las Fuerzas Armadas “y esto no es así”, por lo que afirmó que sería conveniente que se abordará primero lo relativo a Mando Policial, eso despejaría las dudas porque con base a ello se podrían determinar los plazos para que los gobiernos estatales se hagan cargo de la seguridad de sus entidades, y el Ejército pueda salir de las calles.
Aureoles Conejo reiteró que la Seguridad Pública es responsabilidad de los gobierno civiles y que por las circunstancias se tuvo que recurrir a utilizar a las Fuerzas Armadas en tareas que no les corresponde, por lo que insistió en que el Congreso se pronuncié por el modelo policial que se requiere, ya sea único o mixto, y que no se le quite esa responsabilidad a los gobiernos locales.
“Lo que es una realidad es que el Ejército y la Marina han estado haciendo tareas de seguridad pública y aunque dicen que hay un riesgo de militarización y violación de los derechos humanos, creo que hay más riesgo si no existen los mecanismos de control para los casos que así se requiera, la Ley de Seguridad Interior no significa que sea el cheque en blanco para que las Fuerzas Armadas se hagan cargo de la Seguridad Pública”, puntualizó.