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MÉXICO, DF, 30 de diciembre de 2015.- “Hoy tenemos y mañana no”, arguye la señora Margarita Velasco quien ayuda a las personas que llegan al Mercado de Sonora en busca de un amuleto o ritual para que el próximo año nuevo 2016 les vaya bien en lo económico, en la salud y en el amor.
Es el pasillo número 8 de uno de los mercados más tradicionales de la ciudad de México, ubicado justo al sureste del Centro Histórico en la colonia Merced Balbuena, de la delegación Venustiano Carranza, donde se encuentran a estos locatarios quienes se dedican a ser guías espirituales o curanderos.
Al finalizar el 2015, la afluencia de capitalinos aumenta en busca de alguien que les pueda “echar una manita” para les vaya bien y no les falte nada el próximo año.
De 10 personas que llegan, siete son para cuestiones económicas, dos para lo sentimental y una para salud, asegura en entrevista con Quadratín México el señor Manuel Valadez, locatario y guía espiritual en dicho establecimiento.
En este pormenor, influye mucho la edad, coincide con la señora Margarita Velasco, pues mientras los adultos mayores piden por delante la salud, los jóvenes rezan por dinero y prosperidad.
Velas, veladoras, cirios, cubitos (velas pequeñitas), todo esto lleva a lo espiritual para que en el hogar de uno haya paz, tranquilidad y armonía.
Cada color de vela o veladora tiene su significado: el blanco es para la salud, paz y tranquilidad; mientras que el amarillo o dorado es para el dinero y la prosperidad.
“Pero todos los colores se venden porque todos nos hacen falta”, añade la señora Margarita.
Sin embargo, en la vestimenta a usar a fin y principio del año nuevo, también puede haber una depuración de todo lo atraso o malo y de voluntades negativas que las personas cargan encima, explica.
Aunque el color tiene que ver, a veces ya no es necesario hacer ninguna curación o preparación, pues la pitonisa afirma que el uso que se le vaya a dar en relación al amor, ya lo está decretando desde el momento que la persona lo está buscando.
Con 50 años en el Mercado de Sonora, inaugurado el 23 de septiembre de 1957, Margarita Velasco se ha dedicado a todo lo relacionado con el campo espiritual, desde su abuela y su madre.
Por eso, no le parece extraño que lo más vendible sean los borreguitos con semillas de la prosperidad, la misma palabra lo dice: para la “lana”, para que llegue el dinero. Los hay de diferentes tamaños, para el bolsillo, la cartera, incluso para la guantera del carro.
Sabiendo de la situación de las familias mexicanas, estos amuletos son vendidos a precios muy módicos de 10 pesos.
“Hay que ayudar a la gente en cuestión económica para que no se vaya con las manos vacías”, apunta la guía espiritual.
También las espigas de trigo son muy solicitadas, al mismo precio, y así va aumentando depende de la mercancía y cantidad.
En el caso del señor Valadez una veladora personalizada con semillas de las prosperidad, fragancia y polvo dorado, las vende en 45 pesos.
Pero además oferta kits que incluyen fragancia, hierbas, jabón en 60 pesos.
Al Mercado de Sonora llegan personas de todas partes del mundo y estratos sociales, inclusive artistas y políticos, sin embargo, Margarita y Manuel recomiendan que lo más importante es llegar con la fe por delante, sin ésta no pasará nada.