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CIUDAD DEL VATICANO, 17 de octubre (Quadratín México).- El Papa Benedicto XVI alertó a los católicos del mundo de los riesgos de vivir una “religión a la medida” que propone una cultura moderna dominante sin ideales claros y esperanzas sólidas, con una existencia ligera.
“Hoy vivimos en una sociedad profundamente mutada también con respecto a un reciente pasado y en continuo movimiento. Los procesos de la secularización y de una difundida mentalidad nihilista, en la cual todo es relativo, han marcado fuertemente la mentalidad común”, enfatizó.
Ante unas 20 mil personas reunidas en la Plaza de San Pedro, el pontífice afirmó que “así la vida es vivida a menudo con ligereza, sin ideales claros y esperanzas sólidas”.
Benedicto XVI denunció que el individualismo y el relativismo son las características principales de la mentalidad actual, un estilo de vida sin ideales.
Advirtió sobre el peligro del sincretismo, una mezcla de espiritualidades que lleven a una religión de “hágalo usted mismo”, y señaló que, para contrarrestar esta corriente, los católicos deben volver al mensaje de Cristo, haciéndolo entrar en sus conciencias y sus vidas.
“Ni siquiera los creyentes son totalmente inmunes a estos peligros. Síntomas que lo demuestran son una fe vivida en modo pasivo y privado, el rechazo de la educación a la fe, la fractura entre fe y vida”.
Lamentó que las nuevas generaciones no son educadas en la estabilidad de los afectos, en la confianza y en una búsqueda del sentido profundo de la existencia que supere lo contingente.
Al contrario, dijo, el relativismo lleva a no tener puntos firmes, las sospechas y la volubilidad provocan roturas en las relaciones humanas, mientras la vida es vivida dentro de experimentos que duran poco, sin asunción de responsabilidad.
“El cristiano a menudo no conoce ni siquiera el núcleo central de la propia fe católica, del credo, así deja espacio a un cierto sincretismo y relativismo religioso, sin claridad sobre las verdades a creer y sobre la singularidad salvífica del cristianismo”, concluyó.
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