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CIUDAD MÉXICO, 24 de junio (Quadratín México).- El modelo golpista de Honduras se repitió en Paraguay aunque con menos violencia, consideró hoy el dirigente costarricense, Jorge Coronado.
Coronado dijo que a diferencia de la notoria participación militar en el golpe hondureño de junio de 2009, en Paraguay el ejército fue más relegado, indicó.
Nueve meses antes de las próximas elecciones paraguayas, y mediante la remoción de Fernando Lugo de la presidencia paraguaya, el golpe apunta a impedir que el partido que postuló al ex mandatario logre un nuevo triunfo en los comicios de 2013, dijo Coronado a Notimex.
“Es muy interesante que se repite el modelo de Honduras”, y “eso quiere decir que el laboratorio de Honduras empieza a funcionar, porque es aplicar esa vía”, señaló.
“Lo hacen un poco menos bruto que lo que hicieron en Honduras con el papel del ejército”, planteó Coronado, quien encabeza la local Comisión Nacional de Enlace, que integra la Alianza Social Continental, una red de movimientos del sector social latinoamericano.
“Es un laboratorio en términos de que lo hacen unos meses antes del proceso electoral”, lo que “apunta que, efectivamente”, durante el gobierno de Lugo “se había ido logrando consolidar un instrumento político”, dijo.
Coronado aludió a la centroizquierdista Alianza Patriótica por el Cambio, que postuló a Lugo en 2008, una alianza de una docena de partidos políticos y organizaciones sociales opuestos a los tradicionales partidos Liberal y Colorado.
“Se había logrado crear un partido, que podía no sólo garantizar un triunfo presidencial sino una recomposición radical del Congreso y del Senado paraguayo, sacando del juego o quitándole la mayoría tanto a los liberales como a los conservadores”, explicó el dirigente.
Al igual que en Honduras, se nota que no hay ninguna divergencia entre la derecha, “porque tanto liberales como conservadores en Paraguay son parte de esta maniobra”, dijo.
Coronado dijo que con procesos electorales en puerta, como el de Venezuela, los sectores progresistas deberán estar “más alerta ante el embate de la derecha no está ni derrotada ni tranquila”.
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