Localizan vestigios de antiguo muelle en Veracruz

CIUDAD DE MÉXICO, 5 abril, (Quadratín México).- Arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) localizaron vestigios que dan cuenta de un antiguo atracadero o muelle en el sitio prehispánico de Tabuco, en Veracruz.

Un muro de contención, cuatro adoratorios, una estructura circular y pisos estucados de casi mil años de antigüedad fueron encontrados en la zona y podrían tratarse del antecedente prehispánico del puerto de Tuxpan, indicó la arqueóloga María Eugenia Maldonado, responsable del salvamento arqueológico.

En un comunicado emitido por el INAH, destacó que estos vestigios quizá correspondan a un antiguo muelle donde se controlaban las mercancías y el tráfico marítimo de dicho caudal, y de confirmarse sería el primero localizado en la Costa del Golfo.

“Estas evidencias cambian la percepción que se tenía de este asentamiento, ya que anteriormente era conocido únicamente como un área ceremonial, incluso el toponímico que refiere a Tabuco en los Lienzos de Tuxpan consiste en un adoratorio con techumbre cónica a la usanza huasteca”, agregó.

De acuerdo con el INAH, Tabuco se ubica en el margen sur del río Tuxpan -en la cuenca baja-, cinco kilómetros antes de llegar a la playa, y se localiza sobre una franja angosta de tierra firme, la única que existe en la zona, al norte colinda con dicho río y al sur con los manglares de Tumilco.

En los años 40, Gordon Ekholm exploró este sitio huasteco y determinó que su ocupación fue entre los periodos Protoclásico (100 a.C. al 250 d.C.) y el Posclásico Temprano (900-1200 d.C.).

“La exploración en este sitio forma parte del Proyecto Arqueológico Sur de la Huasteca Veracruzana, cuyo objetivo es conocer el sistema de organización política en esta zona de frontera, ya que el río Tuxpan se considera la división étnica entre los huastecos y los totonacos, por ello la importancia de su investigación”, destacó la investigadora del INAH Veracruz.

Actualmente se encuentran protegidos el centro cívico ceremonial monumental o Conjunto C, en el extremo este de una plataforma artificial (550 m de largo y 170 de ancho) sobre la que se emplazaron los edificios principales, además de un montículo aislado al oeste.

Maldonado Vite precisó que “el salvamento arqueológico en Tabuco arrancó en octubre de 2012, con el fin de liberar un predio en la zona más baja del área (que colindaba antiguamente con una laguna) que no presentaba edificios arqueológicos en la superficie”,

No obstante, indicó, durante los sondeos se hallaron algunas estructuras que actualmente se están liberando y serán protegidas.

En el área de excavación, con una dimensión de 60 metros de largo por 40 de ancho, se encontró un gran vertedero de fragmentos cerámicos, restos de animales, desechos de obsidiana y grandes cantidades de concha de ostión.

Un muro con banqueta adosada, estucado y construido a base de grandes lajas de conglomerados de concha molida, fue localizado en la sección noreste, en una orilla del predio.

De 60 centímetros de alto y 60 de grosor aproximadamente, el muro alcanza una longitud de 15 metros, sin embargo, se prolonga en el subsuelo. El terreno tiene un declive, en la parte más alta está a 40 cm de la superficie y en la más baja a 15 cm de profundidad.

También se hallaron tres adoratorios circulares con el mismo sistema constructivo -de 3 m de diámetro- alojados en lo que pudo ser uno de los accesos al centro ceremonial desde la laguna, así como cuatro osamentas prehispánicas y un cráneo de una época posterior.

En la parte oeste del área se halló una estructura circular de 15 metros de diámetro y 60 cm de altura, posiblemente tuvo una función habitacional (de élite) porque se encontró un fogón en la parte superior, además se observa una escalinata.

Por lo que corresponde a la parte sur, se aprecia una rampa que conduce a un piso estucado, que por su ubicación puede tratarse de un atracadero o muelle prehispánico.

La arqueóloga explicó que “en este piso se halló un adoratorio circular más pequeño (de casi 3 m de diámetro), posiblemente sea una zona de control de mercancía porque en el piso hay huellas de paredes de cuartos que quizá en tiempos prehispánicos funcionaron como bodegas”.

Esto, hace pensar que el centro ceremonial funcionaba como controlador de trafico marítimo, así como de la producción en la zona del río y los manglares.

Incluso, agregó María Eugenia Maldonado, “algunos estudiosos lo han manejado como un puerto importante, cuyo mercado era tan fuerte que la Triple Alianza hizo muchos esfuerzos para sujetarlo como provincia tributaria, ya que tenía una importante producción de algodón, recurso que no se podía sembrar en el Altiplano”.

En el área se hallaron 50 entierros de mujeres, hombres e infantes, unos colocados de modo extendido y otros flexionado, en diferentes niveles de la superficie, aunque se analizarán para determinar filiaciones culturales y causas de muerte, entre otros detalles.

Los elementos encontrados se sitúan en diferentes momentos del Posclásico Temprano (900-1200 d.C.) y en periodos muy cortos entre sí, con una variación de poco menos de 100 años.

La gran cantidad de fragmentos cerámicos ubicados en el área permitirán realizar una seriación cerámica con fechamientos precisos de la Cuenca de Tuxpan.

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