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LONDRES, 12 de agosto (Quadratín México).- La mejor participación de México en Juegos Olímpicos fue precisamente como anfitrión de la justa internacional en 1968, pero en Londres los deportistas mexicanos obtuvieron el mayor número de medallas olímpicas en el extranjero.
Cuando México fue anfitrión de la justa veraniega obtuvo nueve preseas, de las cuales tres fueron de oro, tres de plata y tres de bronce, y de ahí en adelante no había logrado acercarse a esta actuación.
Tras la celebración de México 68 fue hasta Moscú 80 que se tuvo una cosecha de más de dos preseas, al conseguirse cuatro (una plata y tres de bronce), y en Los Ángeles 84 se aprovechó la ausencia de los países del bloque socialista para obtener seis medallas (dos oros, tres platas y un bronce).
Previo a la celebración de los Juegos de Londres 2012, en las tres ediciones previas, Sydney 2000, Atenas 2004 y Beijing 2008, México regresó con seis, cuatro y tres preseas respectivamente, y de esas 13 medallas totales tres fueron de oro.
En esta ocasión, México logra en números su mejor actuación al obtener siete medallas, pero en calidad se queda debajo de otras participaciones, pues se lograron dos oros en citas como Londres 48, Los Ángeles 84 y Beijing 2008.
En los Juegos que recién concluyeron por tercera ocasión en la historia en la capital británica, fueron cuatro las disciplinas deportivas en las que México acumuló sus preseas: tiro con arco aportó dos (una plata y un bronce), clavados logró dos platas y un bronce, el futbol con una histórica medalla de oro y taekwondo que consiguió bronce.
De los medallistas que subieron al podio en Londres, Paola Espinosa en clavados y María del Rosario Espinoza en taekwondo, consiguieron presea olímpica por segunda ocasión consecutiva.
La clavadista de Baja California Sur se agenció en Beijing 2008 el bronce en clavados sincronizados en plataforma de 10 metros, haciendo equipo con Tatiana Ortiz, y ahora en esa misma prueba repitió con Alejandra Orozco, pero en Londres se colgó la plata.
A su vez, la sinaloense subió a lo más alto del podio en Beijing, y ahora, tras pasar por varias situaciones adversas los dos años antes de esta justa deportiva, obtuvo una meritoria presea de bronce.
El caso del futbol es histórico, ya que su mejor actuación había sido en los Juegos de México 1968 cuando perdió con Japón en el partido por la medalla de bronce.
Finalmente, la especialidad que también subió al podio olímpico por primera vez en la historia del deporte mexicano fue el tiro con arco, con la obtención de medallas de Aída Román y Mariana Avitia, con la plata y bronce, de manera respectiva.
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