Envía Frida Sofía mensaje en torno a la muerte de su abuela, Silvia Pinal
CIUDAD DE MÉXICO, 11 de junio, (Quadratín México).- Una “acampada” especial pernoctó la madrugada de este lunes en las cercanías del Zócalo de la capital: niñas, niños, adolescentes, jovencitas, chavos, las mamás y un sinfín de admiradores del ídolo juvenil Justin Bieber esperan ansiosas el concierto que hoy lunes se presenta, gratuitamente, en el corazón del Distrito Federal.
En su mayoría son del sexo femenino, sus edades oscilan entre los 12 y los 20 años. ¿Qué las une? El amor platónico adolescente por el jovencito canadiense, a quien le gusta el color morado, es novio de la actriz norteamericana de origen latino, Selena Gómez.
Sus admiradoras mexicanas han convertido a la principal plaza de la capital en “Bierberlandia” y, sin importar las condiciones climatológicas o lo incómodo que pueda ser dormir en la vía pública, sin chistar y acompañadas –la mayoría de las menores– de sus madres o algún otro familiar, cuentan los minutos para ver de cerca o “en vivo” a su artista.
El concierto está programado para iniciar a las 19:00 horas y las autoridades capitalinas recomendaron a los asistentes respetar el mobiliario urbano, evitar portar objetos valiosos y llevar el dinero necesario; no portar armas u objetos punzocortantes o de vidrio, paraguas, bebidas alcohólicas, mascotas y cinturones con hebillas ostentosas.
El Metro dará servicio normal, hasta la medianoche; el Metrobús funcionará en sus líneas 1, 2 y 3 hasta las 23:30 y los trolebuses que circulan por el Eje Central concluirán su servicio a las 02:00 del martes.
Para Eduardo, padre de Silvia, no importaron sus dolores lumbares por conseguir un lugar para su hija menor y dos de sus amigas que los acompañarán. Llegó desde el sábado por la tarde para apartar un lugar.
Hay quienes reconocen que acampar sobre la avenida 20 de Noviembre no es fácil, pero todo sea por ver en el escenario a Justin Bieber, hasta soportar cucarachas y ratas, hambre, calor y frío, “todo por verlo”, dicen al unísono Rocío, Mariana y Frida, y con sonrisas se acurrucan en su casa de campaña para esperar el momento de verlo…es su gran día.
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