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WASHINGTON, 11 de abril (Quadratín México).- El ex embajador mexicano en Estados Unidos, Arturo Sarukhan, expresó hoy su expectativa que el Congreso estadounidense ratifique el acuerdo de Yacimientos Transfronterizos de Hidrocarburos en el Golfo de México antes del viaje del presidente Barack Obama a México.
Sarukhan participó en una conferencia en el Instituto Brookings sobre temas a tratarse en el encuentro entre el presidente Enrique Peña Nieto y Obama en mayo próximo.
Indicó que el acuerdo forma parte de la agenda a tratar entre los dos mandatarios, que incluye las energías renovables y la seguridad energética.
El acuerdo firmado en febrero de 2012 entre los dos países requiere ser ratificado por el Congreso estadounidense para entrar en vigor.
Este jueves se realizó una audiencia en el Senado estadounidense para discutir temas energéticos y se tiene prevista otra sesión la próxima semana.
El acuerdo establece el marco legal para la administración de la región limítrofe entre los dos países en el Golfo de México, a fin de explotar comercialmente las reservas de petróleo y gas.
Asimismo establece directrices para los desarrollos transfronterizos marítimos e incentivos para las compañías de petróleo y gas que voluntariamente entren en arreglos para desarrollar conjuntamente las reservas en la región del Golfo de México.
Sarukhan apuntó además la importancia de que en las pláticas de ambos mandatarios se incluyan temas cómo la infraestructura en la frontera para la facilitación del intercambio comercial.
Asimismo temas como la Alianza Transpacífica (TTP) y también el tratado comercial entre la Unión Europea y Estados Unidos, que aún se negocia.
“México ha expuesto razones de por qué debe involucrarse en las negociaciones transatlánticas Unión Europea-Estados Unidos, al ser el único país que ya tiene un tratado de libre comercio con la Unión Europea”, remarcó el diplomático mexicano.
Señaló que las conversaciones requieren incluir cómo debe México trabajar con Estados Unidos si se aprueba la reforma migratoria en unos de sus componentes críticos, como el manejo de los flujos de inmigrantes de los programas de trabajadores temporales.
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