
Con dirección del Metro, Rubalcava “se sacó la rifa del tigre”: Döring
CIUDAD DE MEXICO , 12 de julio (Quadratín México).-El único problema en estas elecciones es la participación de un mal perdedor – Andrés Manuel López Obrador-, quien se niega a admitir que es un candidato menos competitivo y no cuenta ya con el respaldo del electorado, sostuvo el dirigente nacional del PRI, Pedro Joaquín Coldwell.
Debido a sus propias acciones, como el plantón en Paseo de la Reforma en 2006, e incluso en Distrito Federal donde 500 mil capitalinos ya no emitieron su voto a favor de los partidos que representa, dijo Coldwell, perdió las elecciones el presidente del PRI.
Al no reconocer los resultados electorales, agregó, López Obrador “ofende la dignidad de millones de mexicanos que ejercieron sus derechos políticos con dignidad, a quienes descalifica con la presunta venta de su voto”.
Pero además, puntualizó, López Obrador falta a un principio fundamental de la democracia, reconocer los resultados electorales aun en la adversidad y, con ello, “evade responsabilidad ante los partidos que lo postularon por no haber sido la mejor opción”
Minutos después de que López Obrador hiciera oficial que impugnará las elecciones, Coldwell emitió este mensaje ante los medios –sin aceptar pregunta alguna-, en el cual destacó las grandes virtudes del proceso electoral.
López Obrador, dijo el dirigente tricolor, pasa por alto el monitoreo que el IFE siguió con el concurso y colaboración de la UNAM respecto a la cobertura informativa de la radio y televisión; la elección unánime de los consejeros del Instituto Federal Electoral (IFE) por todas las fuerzas políticas en el Congreso, incluidos los partidos de izquierda.
“Pasa por alto que fue la elección más equitativa y vigilada, millones de ciudadanos lo hicieron, la Organización de Estados Americanos declaró que México tenía la institución electoral más robusta de América Latina”.
Incluso, enfatizó Coldwell, López Obrador pasa por alto que él mismo presumió durante su campaña que había logrado de tener representantes en casi la totalidad de las casillas y estodaba garantías de un proceso limpio.
El presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, hizo énfasis en que en estas elecciones, por vez primera en la historia, se contaron “voto por voto” el 55 por ciento de las casillas sin que se alterara el resultado, “y pese a ello, -AMLO- ha descalificado este recuente hecho por cientos de funcionarios electorales y representantes de los partidos políticos”.
Y fue en este contexto en que hizo énfasis en la pérdida de fuerza político electoral de López Obrador: “Lo que no reconoce es que fue un candidato menos competitivo que hace 6 años, antes ganó en 16 estados, ahora en 8. En 2006 ganó en tres circunscripciones, ahora en una. En 2006 fue puntero y y acabó perdiendo por una diferencia de de 233mil votos. En 2012, jamás consiguió ser puntero y terminó debajodel ganador por 3 millones 329 mil 785 votos”.
Coldwell subrayó que AMLO perdió el respaldo del electorado en todo el país: “En 2006 quedó tercer lugar en 10 entidades de la República. En estas elecciones se fue a tercer lugar en 17 entidades federativas. En 2006, la votación que obtuvo representaba el 20.5 por ciento del padrón electoral, en esta elección se redujo al 18.8%”.
La debacle de López Obrador, sostuvo, fue palpable incluso en el principal bastión perredista: “Aun con su triunfo en la Ciudad de México, medio millón de capitalinos votaron de manera diferenciada respecto a los votos que obtuvo su ganador de la jefatura de gobierno, miemnbro de su propio partido”.
A decir del líder del Revolucionario Institucional, el problema de López Obrador es que no logró superar las percepciones negativas sobre su propia persona, las cuales incubó al desconocer los resultados electorales en 2006 y proceder a movilizaciones de inconformidad, como mantener sitiado Paseo de la Reforma durante varias semanas.
Finalmente, Joaquín Coldwell reiteró que el PRI defenderá el triunfo de su candidato presidencial Enrique Peña Nieto y demostrará ante las autoridades electorales que son falsas las acusaciones de la compra del voto. “Se trata no solamente de reconocer nuestra victoria, sino también de defender los votos de millones de mexicanos”.
QMEX/yvt/grr