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PUEBLA, 8 de marzo (Quadratín México).- Al mejor estilo de asaltantes de transeúntes, a bordo de dos camionetas un grupo de empleados de la Dirección de Vía Pública del Municipio de Puebla, irrumpió violenta y arbitrariamente en la Plazuela de los Sapos, ubicada a dos calles de la Plaza de Armas o Zócalo de la capital poblana donde, desde hace más de 40 años, se venden antigüedades, arte y cultura.
Dueños y empleados de los bazares comentaron que, “sin decir agua va y como si se tratara de un robo en despoblado, los gorilas de vía pública, cuyo director es Miguel Méndez, arrebataron anuncios, artículos, antigüedades y cuadros a los bazares establecidos que en sus banquetas o el equivalente en espacio ofrecían sus mercancías”.
Molestos por esta acción de la que responsabilizaron al presidente municipal Eduardo Rivera Pérez, puntualizaron que en ningún momento los dueños y encargados de bazares establecidos recibieron alguna notificación por escrito de que no se podía exhibir la mercancía en la parte exterior de los locales como tradicionalmente se hacía.
“Debemos admitir que hubo comunicación verbal por parte de los dos líderes de las nuevas políticas de deslumbrón de parte del municipio, de presentar a los turistas nacionales e internacionales una ciudad sin vendedores ambulantes a pesar de que la entidad es donde se produce cada día más pobres, pero no somos vendedores ambulantes. Y quienes se instalan en la plaza los fines de semana lo hacen ordenadamente”, explicaron en entrevista.
Además, en un desplegado dirigido a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla, con copia para la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y medios de comunicación estatales y de edición nacional, los comerciantes y anticuarios manifestaron que a los líderes que los representan “y respetamos, tomamos en cuenta su petición de no hacer plaza todos los días, tan es así que la mercancía que exhibíamos en la plazuela la reducimos sólo en la parte exterior, es decir en lo que equivale a la banqueta de cada negocio”,
Por ello, la indignación creció entre los propietarios de los bazares, de los chachareros y del grupo de albañiles y cargadores que ahí laboran, ante la arbitraria acción de los representantes de la autoridad municipal que se comportaron como ladrones. “Los hombres del presidente municipal Eduardo Rivera, aplican la ley y los reglamentos violando la ley y a su antojo”, acusó uno de los comerciantes.
Incluso, puntualizó, “los gorilas de don Miguel Méndez, en un conato de violencia, se juntaron para intentar golpear al periodista independiente Héctor A. González, propietario del bazar El Colibrí, situación que no se concretó por la actitud valiente de sus compañeros de la plazuela de los Sapos”.
Y es que, los reclamos que hacia el señor González, junto con otros compañeros, fueron en el sentido de que los gorilas en cuestión, no trataran a los propietarios de los bazares como tepiteños que venden mercancía pirata y droga, porque, argumentaron, “nosotros estamos legalmente establecidos y pagamos impuestos”.
“La verdad –terció el empleado de un bazar—nos indignamos más cuando los gorilas que se visten de policías pretendieron detener arbitrariamente a uno de los bazareros”.
En el desplegado de referencia, los dueños y encargados de los bazares de la Plazuela de Los Sapos, acusan: “Es de tal dimensión la ignorancia de los hombres del PAN en el poder en el municipio de Puebla, sobre todo de Miguel Méndez, quien desconoce que el mercado de antigüedades, los bazares y galerías, da trabajo directa e indirectamente a más de mil personas, entre vendedores, anticuarios, libreros, restauradores, pintores, talladores, muebleros, mudanzeros y cargadores.
“Por si fuera poco, los panistas en el poder en el municipio poblano, con su política de apariencias y deslumbrón, sobre todo ahora que viene el Tianguis Turístico, ignoran que en la Plazuela de Los Sapos –con sus bazares y galerías—son un atractivo turístico y es visitado por miles de personas los fines de semana.
“Pero, además de atractivo turístico, es un mercado receptor de la historia de México y de Puebla, donde se rescata el arte, las artesanías, los libros, la talavera y en general todas las expresiones de la cultura de todo un pueblo. En la historia de puebla, los panistas poblanos en el gobierno pasarán a la historia como los sepultureros de esta bonita y cultural tradición al reprimir como si fueran delincuentes a los que invierten en este tipo de negocios. En lugar de aplicar su política de gorilas, deberían promocionar esta valiosa actividad y como diría Salvador Novo, en su libro: “En Defensa de los Usado.
“Entre sus políticas innovadoras de deslumbrón, los panistas en el poder se encuentra lanzar a la calle a los comerciantes de antigüedades para ceder este espacio a las franquicias. Es decir esta tradición, cuya sede ha sido la Plazuela de Los Sapos, durante casi 40 años, será desalojada para darle cabida a las cadenas de restaurantes y convertir esta área en zonas de terrazas para comensales de alto poder económico. Es decir los panistas en el poder trabajan duro y tupido para las franquicias extranjeras. Turistas que seguramente serán asaltados por la delincuencia que se ha incrementado en la zona.
“Como dirían los diputados de la oposición cuando estaba en el cargo Bruno Ferrari como secretario de Economía, al calificarlo como el defensor de los intereses extranjeros. Es decir un vende-patrias.
“Por todo lo anterior y por las amenazas vertidas veladamente en contra del señor González y otros compañeros y compañeras, responsabilizamos al presidente municipal Eduardo Rivera de cualquier tipo de agresión en contra las personas o negocios que participamos en la justa protesta. Sabemos que tiene en su poder un video de nuestra indignación ante el gorilazo”.
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