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ZACATECAS, 22 de noviembre (Quadratín México).- El procurador Arturo Nahle García confirmó la muerte de Sergio Rafael Barraza Bocanegra, autor material del asesinato de Rubí Marisol, hija de la activista Marisela Escobedo, quien también fue asesinada.
La muerte ocurrió el pasado viernes durante un enfrentamiento con integrantes del Ejército en el municipio de Joaquín Amaro, en el que murieron cuatro presuntos delincuentes, entre los que figura Barraza Bocanegra, a quien se le ha ligado como integrante del grupo delictivo de Los Zetas, de acuerdo con nuevas declaraciones ministeriales ante la Fiscalía zacatecana.
Nahle informó que la actual esposa de Barraza Bocanegra se presentó el miércoles al Servicio Médico Forense para identificar y reclamar el cuerpo.
En 2009, el homicida recibió una sentencia de 50 años de prisión en Ciudad Juárez, aunque después un tribunal de juicio oral lo dejó libre al considerar que no había pruebas suficientes en su contra.
Desde entonces, Marisela Escobedo se convirtió en una incansable activista para exigir justicia por la muerte de su hija y solicitar juicio político contra los jueces que dejaron libre a Barraza. Finalmente, el 16 de diciembre de 2010, Marisela fue asesinada frente al palacio de gobierno de Chihuahua cuando exigía justicia.
El procurador de Zacatecas informó que de acuerdo con una declaración ministerial de la esposa de Barraza se supo que éste era integrante de Los Zetas y que actualmente tenía su domicilio en el municipio conurbado de Soledad de Graciano Sánchez, San Luis Potosí, pero ocasionalmente se trasladaba a Zacatecas a los municipios de Villanueva, a Tabasco y a Fresnillo.
El sábado pasado, en un comunicado de la 11 Zona Militar se informó sobre el enfrentamiento, en el cual también se decomisó armamento, entre el que figuraban siete fusiles AK-47 y ocho granadas calibre 40 milímetros.
Arturo Nahle puntualizó que debido a que la Fiscalía de Chihuahua tenía una orden de reaprehensión en contra Barraza Bocanegra, la Procuraduría de Zacatecas notificó este hecho a la autoridad encargada de la investigación del homicidio de Rubí y de Marisela Escobedo.
Barraza fue pareja de Rubí, una adolescente de 16 años, y enfrentó un juicio oral por homicidio en los nuevos juzgados de Chihuahua; durante el procedimiento Sergio Rafael admitió haber asesinado a Rubí porque “le había sido infiel”.
A pesar de la evidencia en su contra, en abril de 2010 Barraza fue dejado en libertad. Los jueces reconocieron que se equivocaron, pero el acusado ya había huido.
La madre de la joven Marisela Escobedo emprendió entonces una lucha para exigir justicia y un eficaz combate de los feminicidios en Ciudad Juárez, lo que le acarreó amenazas de muerte.
Finalmente fue asesinada en diciembre de 2010 frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua de un balazo en la cabeza por un sujeto encapuchado.
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