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CIUDAD DE MÉXICO, 10 de enero (Quadratín México).- El proyecto Dragon Mart, en Cancún, Quintana Roo, representa un riesgo ambiental, social, económico, laboral e incluso en contra de la cultura Maya, por lo que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y los estados de Quintana Roo, Yucatán y Guanajuato se han pronunciado en contra del mismo, aseveró la diputada Graciela Saldaña.
En entrevista con Quadratín México, la legisladora refirió que ha habido diversas especulaciones en torno a este proyecto, desde la pretensión del ingreso a México de 10 mil chinos, hasta la existencia de severos intereses políticos y económicos donde se encuentran involucrados el ex presidente Vicente Fox, y el ex gobernador y hoy senador Félix Canto.
En todo caso, apuntó, lo importante es que las autoridades involucradas, es decir las secretarías de Economía, Medio Ambiente, así como la oficina de Migración de la Segob, proporcionen a La Comisión Permanente del Congreso, como se ha solicitado, referente al estatus de este proyecto, a fin de que haya absoluta claridad sobre el mismo.
“No sé si se pretenda realmente ingresar a México cinco mil o 10 mil chinos, en todo caso lo importante es que se respeten las normas de México a cabalidad, que se cumplan todos los permisos que debieran”, acotó la legisladora por el sol azteca.
Es necesario, insistió, aclarar que afectaciones provocará, desde lo concerniente a la construcción de vivienda hasta las zonas ecológicas que puede afectar.
“La verdad es que todo proyecto puede tener afectaciones sociales y ambientales, pero hablamos de un estado rico en recursos naturales… Se habla de construir un puerto de altura, pero esto sería cercano a Puerto Morelos que es un área natural restringida, protegida por los arrecifes de coral, somos la segunda barrea de arrecifes más importante después de Australia, y debe garantizarse que no afectará el medio ambiente”.
Ante esta situación, apuntó Graciela Saldaña, se ha dicho que podría establecerse el puerto por Progreso, Yucatán, pero ya el alcalde de esta localidad se ha manifestado en contra, precisamente por las graves afectaciones ambientales y sociales que representaría.
También hay implicaciones económicas trascendentales, abundó la diputada, pues la edificación se pretende realizar en una delegación importante, Benito Juárez, que es la cabeza en generación de divisas y arribo de turistas.
Otro aspecto que es imperioso, es “atender las diversas manifestaciones en contra que han emitido los productores de la industria textil y del calzado, pues ya incluso el estado de Guanajuato se ha manifestado en contra del Dragon Mart”, porque sienten que amenaza a los productores nacionales.
A ello se agrega el riesgo de que se desplace de fuentes de empleo a los propios mexicanos por dar espacio a los miles de asiáticos que se dice implica el complejo, por ello la Secretaría de Economía debe aclarar cómo beneficiaría a nuestro país Dragon Mart, pues “la información no es nada clara tampoco en lo referente a esto, primero se dijo que el 90 por ciento de los trabajadores a contratar serían mexicanos, otros dicen que sólo 10%, es algo que se debe de aclarar puntualmente con la investigación que se genere”.
Por otra parte, abundó la legisladora, el Instituto Nacional de Antropología e Historia ya apuntó que se pretende afectar una importante área arqueológica de la cultura Maya, por lo que se requieren permisos para un complejo de tal magnitud, los cuales quedarían totalmente sujetos al respeto total de la riqueza cultural de la zona.
En suma, “se requieren respetar a cabalidad los aspectos cultural, ambiental, y toda la parte jurídica, con lo que debe contar un proyecto como este, debe de contar con permisos municipales, estatales y federales, no es una cuestión xenofóbica, sino debe ser medido”, en la justa dimensión que implica para México, concluyó Graciela Saldaña.
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