Visión financiera
La Suprema Corte de Justicia de la Nación aceptó el recurso de inconstitucionalidad interpuesto por los diputados del PRI en contra de las reformas aprobadas en el Senado a fin de que sea la Cámara Alta la que se encargue de ratificar los nombramientos que haga el Ejecutivo en el área de Seguridad.
Como se sabe, Enrique Peña Nieto promovió, como presidente electo, una reforma a la administración pública, mediante la cual desaparecería la Secretaría de la Función Pública y la Secretaría de Seguridad Pública se convertiría en una subsecretaría en Gobernación.
La idea tenía como eje, el dar efectividad las áreas en las que se habían registrado serios desencuentros entre funcionarios y pocos resultados para la sociedad.
El proyecto, que tuvo a la cámara de Diputados como Cámara de origen, fue aprobada sin mayores problemas. Pero al llegar al Senado, las cosas ya no fueron igual.
Primero, se detuvo el proceso y se dejó correr el tiempo, a pesar de que resultaba obvio que EPN había presentado el proyecto vía sus compañeros de partido, para tener listas las reformas al momento de iniciar su gestión.
Pero en el Senado, la bancada del PRI fue incapaz de alcanzar un acuerdo. Y como sucedió con la reforma educativa, la suma de PAN y PRD fue suficiente para vencer a los senadores priistas. Pero no sólo eso, las oposiciones modificaron el proyecto de Peña Nieto y forzaron el que los mandos en seguridad, fueran ratificados por los mismos senadores. Y además, aprobaron que el titular de Gobernación se presentara en el Senado para, cada seis meses, explicar acciones y problemas en el área.
Estas modificaciones, de acuerdo a los priistas, violenta el derecho del Presidente, establecido en la Constitución, para nombrar y remover a sus funcionarios sin tener que pasar por el Congreso.
Así, se inició el trámite de inconstitucionalidad que fue aceptado por la SCJN, que ahora ha solicitado a las partes, el alegato en favor de sus posiciones.
Se espera que la Corte falle a favor de los diputados del PRI, ya que es obvio que los senadores del PAN y del PRD, lo que buscan es tener control sobre decisiones que hasta el momento, han sido atribuciones del Ejecutivo Federal.
Pero el problemas no es ese. Incluso, se espera que la propia Corte deje sin efecto la modificación aprobada por el Senado en tanto no se decide el fallo final sobre las reformas.
El problema es que la bancada del PRI en el Senado ha sido incapaz de alcanzar los acuerdos que se requieren para sacar adelante las modificaciones necesarias de acuerdo a los proyectos del nuevo gobierno.
La reforma educativa, el tema del IFAI y el de la administración pública son apenas parte del problema de falta de liderazgo en el Senado. La situación ha llegado a tal punto, que el titular de Gobernación, Miguel Osorio Chong, se ha visto en la necesidad de buscar por caminos más efectivos, la negociación, lo que ha llevado a que Enrique Peña Nieto asista a encuentros con los senadores de oposición, con la idea de fortalecer a su grupo parlamentario.
Pero el conflicto está ahí. El recurso de inconstitucionalidad es una medida que, por obvias razones, fue apoyada por el Presidente de la República. Y eso lo sabe todo el mundo. Puede ser que a final de cuentas, sea puesta en marcha como la buscó desde un inicio EPN.
Sin embargo, hacia el futuro mediato, aparecen reformas vitales, como la energética y la fiscal. Y la pregunta obligada es ¿tendrá que negociarlas el presidente para poder contar con ellas?, ya que es claro que, como están las cosas, Emilio Gamboa no podrá con el paquete.
QMX/nda