LA COSTUMBRE DEL PODER: El futuro de AN

12 años de presidencialismo panista muestran el verdadero talante y auténtico compromiso de quienes se comprometieron a transformar México. ¿Dónde están los principios plasmados en el documento fundacional de su Asamblea Constituyente, celebrada los días 15 y 16 de septiembre de 1939? Muy lejos, lo muestran los rastros de la corrupción e impunidad dejados por todos lados. Es un tiradero.

¿A qué aspiraron? “La creación y administración de un orden dinámico que jerarquice justamente las diversas funciones y los distintos intereses que existen dentro de la vida social, no es patrimonio de un hombre o de un grupo social determinado. A la creación y administración de ese orden, deben concurrir la inteligencia y la voluntad de las personas que conviven dentro del Estado. Cumplir este deber político es necesidad imperiosa y urgente, cuya omisión acarrea el envilecimiento de la vida social.

“La formación de partidos que organicen el cumplimiento del deber político, y sean permanentes en su actividad, como permanente es su fin, es necesidad evidente dentro de la realidad histórica de México”.

Los resultados están a la vista, a pesar de que el gobierno federal oculte, por el momento, las consecuencias de sus políticas públicas, pues como se ha consignado sin ser desmentido, hace 10 meses que no se proporcionan cifras oficiales sobre el número de muertos, se sabe ya que muchos de los cadáveres se entierran sin ser identificados, mientras que casi ninguno mereció que se levantara una averiguación previa para determinar las causas de su ejecución, homicidio o la manera en que perdió la vida y por qué.

Lo anterior es una de las numerosas razones por las cuales Acción  Nacional perdió la Presidencia de la República, se convirtió en la tercera minoría en el Congreso, perdió gubernaturas y congresos locales y, además, tiene una pésima imagen, sin contar que su estilo en administración pública fue sectario, y su postración para servir los intereses de Estados Unidos es inocultable.

¿Cómo, entonces, puede el omiso presidente constitucional saliente y perdedor electoral, aspirar a reconducir al PAN? ¿Cómo puede Acción Nacional ser ejemplo, para que sus principios fundacionales no sean negados por la realidad, y éstos, sin modificar su postura ideológica, sean actualizados para que las consecuencias de la globalización y el libre mercado, no desmientan su posición política, sus políticas públicas, su deseo de continuar en el poder?

El PAN, dicen los enterados, únicamente podrá responder a sus compromisos fundacionales si quien los condujo al estrepitoso fracaso administrativo, político y electoral se retira de la vida partidista.

QMex/gom