ACENTO: El PAN no necesita refundarse

Más causas de esto son el abandono del PAN de sus principios humanistas y democráticos y del acercamiento a la sociedad, los arribistas y panistas  chambistas,  el nepotismo, el desprecio a las bases y la imposición de candidatos, desprestigiados muchos de ellos.

No precisa refundar a Acción Nacional. Simplemente volver a sus orígenes, pero con la humildad de quien llegó a la cima del poder y se desbarrancó por soberbia y por haber olvidado sus cimientos.

De  eso tuvo mucha culpa Vicente Fox, que  sintió no deberle su triunfo al PAN y gobernó sin sus principios ni sus hombres; por ello no extrañó se fuera al otro bando, por su índole arribista, y como tal usó al PAN.

Se equivocaron Fox y Calderón al  entregar comunicación social a gente ignorante. Quizá Marta Sahagún fue buena jefa de prensa del gobierno de Guanajuato, no  dela Presidenciay más cuando su ambición era asaltar el poder, como lo logró, y puso a personas inexpertas en aquélla.

¿Qué sabe Rodolfo Elizondo de comunicación? Rubén Aguilar, el intérprete de los dichos de Fox, se concretó a eso y descuidó la interrelación indispensable con los medios

Max Cortázar y Alejandra Sota lo secundaron y hasta pareció que odiaban a la prensa y a los comunicadores. Vedaron a las oficinas respectivas de las secretarías dar sus noticias: debían enviarles sus boletines para aprobarlos y, si les iba bien, se los  autorizaban una semana después, cuando las notas habían perdido actualidad.

Hicieron que el presidente Calderón  dé las informaciones que, por desgracia, por el desgaste  político  que ellos mismos le propiciaron, eran cada vez  menos atendidas,  criticadas eso sí  y tildadas de mentirosas.

Grave es su responsabilidad en, por ejemplo, que importantes  logros en economía y finanzas se desconocieran; mientras  Lula, en Brasil, exaltó los propios, muy inferiores a los nuestros.

(Vivimos 12 años de estabilidad económico-financiera, sin devaluaciones traumáticas ni pérdidas aterradoras del patrimonio familiar.)

No puede soslayarse que aquello influyó seriamente  en el fracaso electoral, con la falta de destreza política en los líderes.

Eso sí fueron expertos en mandar hacer spots  y anuncios  impresos,  se dice que  por negocio y no extraña, por tanto,  se hable de que Alejandra Sota trabajará en una empresa del ramo, relacionada con Televisa.

Así las cosas, nunca se preocuparon por que los secretarios, funcionarios y legisladores panistas  dieran notas o  declararan, pues ven más bien como enemigos a los reporteros, quienes se fueron con los priístas y, sobre todo, perredistas, que  se dan el quien vive a ver quien declara más, sin importar lo que digan; por eso son más  duchos, al decir de Madero.

De ahí que ganen más publicidad para la izquierda y sus cosas, ciertas o no; pero que ocupan espacios que el PAN  despreció y dejó a los críticos y denostadores profesionales de Calderón.

La debacle del PAN en el DF –donde se quedó apenas conla Delegación BenitoJuárez- es resultado del pésimo papel de Mariana Gómez del Campo como lideresa del PAN, al que no dio ninguna presencia noticiosa, sino sólo de chismorreo, y fue muy hábil para sacar raja de su parentesco, lograr senaduría para ella, una  curul federal para su hermano Gabriel y para su novio Jorge Romero la delegación Benito Juárez.

¿Cuándo hubo una crítica, denuncia, siquiera cuestionamiento del PAN a gobierno de Ebrard?

Además de que abultaron padrones, hicieron acarreos y demás  trampas  antidemocráticas para imponer a candidatos: Jorge Romero fue de ellos. Hubo muchas  denuncias en Cuajimalpa y tras diputaciones y aun del candidato a jefe de gobierno; lo que zanjó la nominación de Isabel Miranda de Wallas, apartidista.

Los tres jefes nacionales del PAN en el sexenio actual fueron fatales: Germán Martínez lo sepultó en la elección de 2009; César Nava obedeció con las alianzas con el PRD en elecciones de estados, donde encumbraron a gobernadores que no eran panistas ni quieren nada con ellos.

¿Cómo iban a apoyar, si se quiere legalmente, Mario López Valdés, Gabino Cué y Rafael Moreno Valle a candidatos a disputados y senadores y a la presidencial del PAN, si no son suyos. En cambio, ayudaron a los de otros partidos, como Malova que no regateó respaldo a priístas.

Esa pésima inversión del PAN fue  determinante en la debacle del 1 de julio. Fue un partido sin identidad.

¿Para qué hablar de refundación?

Tampoco conviene que Calderón tome la batuta. Será más saludable que propicie una auténtica autocrítica -descarnada al interior- para renovar al partido; si no volverán a lo mismo, como en 2009, cuando Germán soltó los bártulos y nadie  se preocupó por analizar las causas de la derrota, que fue también tremenda.

Difícil es cuantificar cuántos puestos de elección perdió el PAN en el sexenio. Empecemos porla Presidenciadela República, 8 gubernaturas, 24 senadurías, 79 curules federales. ¿Cuántas alcaldías, regidurías y diputados estatales?

Si Acción Nacional desea, en verdad, abandonar el paso del cangrejo, que retome sus principios, su democracia, desinterés de sus líderes, y formar dirigentes no sólo comprometidos, sino con oficio político, otro aspecto básico en que les aventajan los de enfrente.

Fuera los arribistas, nepotistas  y quienes se mueven  sólo por la chamba, que es legítima, pero si es fruto de una buena batalla en favor de la causa.

QMex/sfl