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MÉXICO, DF, 11 de julio de 2014.- La industria de capitales en América Latina definitivamente ha madurado y los inversores reconocen que el momento actual ya no es sólo de Brasil, sino que es la hora de México, destaca un artículo que publica el prestigiado diario estadounidense The Wall Street Journal.
Los inversionistas suelen pasar por alto el poder adquisitivo de los mexicanos, dada su reputación como un centro de fabricación de Estados Unidos, a pesar de que el consumo privado en el país ronda los 700 mil millones de dólares anuales, aseguraron al diario estadounidense ejecutivos de la firma especializada en mercados emergentes Abraaj Group.
Y es que el grupo Abraaj ha estado invirtiendo en empresas relacionadas con el consumidor. La más reciente es la venta de su participación mayoritaria en el transporte de la compañía de arrendamiento de equipo de Analistas de Recursos Globales SAPI de CV, a Docuformas SAPI de CV, una franquicia mexicana de la empresa de arrendamiento financiero canadiense Liquid Capital.
Abraaj mes pasado vendió su participación minoritaria en redIT, empresa de computación y electrónica con oficinas en México y San Diego, a los proveedores de centros de datos de servicio de KIO Networks.
Pero Abraaj no es el único, otros inversionistas han estado calentando para el país. A principios de este año General Atlantic concretó su primer negocio en México con su adquisición de la farmacéutica Laboratorios Sanfer y espera abrir oficinas en México.
El Journal destaca también las nuevas inversiones mexicanas de la empresa suiza Partners Group que en febrero compró a la neoyorquina Ospraie Management su participación mayoritaria de la empresa Fermaca de administrador de activos de Nueva York.
Según los datos de la Latin American Private Equity y Venture Capital Association, la recaudación de fondos para México por esos conceptos alcanzó mil 40 millones de dólares en 2013.
El diario estadounidense señala que eso se traduce en un 19 por ciento del total de la región, por debajo de los 2 mil 340 millones de dólares que recaudó Brasil, pero un marcado incremento de 300 millones de dólares registrado en el 2012.