Revira Fernández Noroña ante amago de Trump sobre aranceles
MÉXICO, DF, 15 de julio de 2014.- La problemática de la migración en el mundo no se resolverá levantando muros, sino tendiendo puentes, aseveró Marcelo Sánchez, canciller de la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales, en su participación en el Coloquio México-Santa Sede sobre Migración y Desarrollo.
El sacerdote católico advirtió que “lo que agrava el problema es la utilización perversa de los niños para explotarlos laboralmente, llevarlos a la guerra, prostituirlos o comerciar con sus órganos”, dijo.
Por ello, el sacerdote urgió a erradicar la trata de personas, a la que calificó como una nueva y más violenta forma de esclavitud, y propuso el modelo que usó el gobierno italiano para enfrentar a la mafia: quitarle el dinero y usarlo para rescatar a sus víctimas.
Por su parte, Flor María Rigoni, director de la Casa del Migrante Belén, que se ubica en Tapachula, responsabilizó a las política exterior de los Estados Unidos del fenómeno migratorio, y señaló la necesidad de que el gobierno del vecino del norte reconozca las situaciones que ha provocado.
Asimismo, llamó a los gobiernos de México y Centroamérica a reconocer la situación de violencia que viven sus países y propuso un plan de contención ayudando a las casas de migrantes para que ellos sientan que son tratados humanamente, además de lanzar una Convención, como fue la de Cartagena, para buscar una migración legalizada.