Busco a mis hijos con el dolor de respirar ante su ausencia: Ceci Flores
CHILPANCINGO, Gro., 6 de agosto de 2014.- Para dar seguimiento a los abusos de la Policía Ciudadana, que opera el Valle del Ocotito y en Mojoneras, vecinos integraron un grupo que llamaron Ciudadanos Unidos para el Desarrollo del Ocotito.
Según lo publicado por El Sur, en la cancha de basquetbol de Barrio Viejo, ante unas 70 personas, un profesor de apellido Verduzco aclaró que la organización no querían provocar división en el poblado, pero era necesario integrar un comité que acompañe a las víctimas de agresiones, como disparos contra un ciudadano que resultó herido, detenciones arbitrarias, extorsiones y hostigamiento a quienes los cuestionan.
En la reunión, se precisó que este movimiento no está contra el Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadana (SSCJ) de la Unión de Pueblos y Organizaciones de Guerrero (UPOEG), de donde surgió este grupo de la Policía Ciudadana, sino de las personas que lo operan y que hace varios meses desconocieron al dirigente de la organización, Bruno Plácido Valerio.
Esa división provocó que hoy existan dos bases del SSJC en el valle del Ocotito: la de Ocotito y Mojoneras, y otro que se ubicó en la comisaría de Buena Vista de la Salud; la primera encabezada por un grupo de Ocotito que exigió cuentas claras a los anteriores operadores, y la segunda, que tras la confrontación, coordina la Policía Ciudadana de Tierra Colorada.
Entre los responsables de las arbitrariedades, señalaron al promotor de la UPOEG, Crescenciano Sánchez López; los vecinos Nelvia Edilia Sánchez López y Silvestre Plancarte Mondragón, entre otros, contra quienes también hay demandas en el Ministerio Público.