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FERGUSON, Mossouri, 16 de agosto de 2014.- El estado de excepción se da tras los enfrentamientos y disturbios en Ferguson, Missouri, por la muerte del joven Michael Brown en manos de la policía en esta localidad, según informa National Post.
“Tenemos la obligación de mantener la paz. Los ojos del mundo están mirando”, dijo el gobernador Jay Nixon, quien además decretó un toque de queda de 24 horas en Ferguson.
La tensión aumentó dos días atrás, cuando las autoridades revelaron la identidad del agente que efectuó los disparos contra Brown y reportó documentos que probaban que el joven había robado en una tienda, poco antes del suceso.
La policía local informó que al menos 40 agentes del FBI (Buró Federal de Inteligencia), han ido puerta por puerta para compilar versiones y testimonios sobre la muerte de Brown. Vecinos aseguran, que la víctima se encontraba desarmado y con las manos al aire, cuando el policía realizó los disparos en el pecho y la cabeza.
Durante las dos últimas semanas, esta pequeña población ha vivido duros incidentes y disturbios contra los agentes de la autoridad desde que se reportó la muerte de Brown.
Más de 50 personas han sido arrestadas estos últimos días por delitos de agresión a la autoridad y saqueos, y entre ellos, hay otro joven herido de gravedad por disparos de la policía durante una marcha. El equipo de intervención de élite de la policía SWAT, se ha personado en varias marchas con armas de alto calibre.