Abanico
¿Se habrá enterado?
Para qué hablar de política si a nadie de los que pagamos para que de ella viva, llama la atención. En especial al joven mandatario.
¿Se habrá enterado?: Guerrero, Tamaulipas, Michoacán, Estado de México, Morelos, Coahuila, Nuevo León, etcétera están en llamas.
Su estado actual solamente repugna: Asesinatos al por mayor. Más promesas para resolverlos. Prófugos. Cómplices. Atracos. Más promesas. Corrupción. Quienes viven en y de ella necesitan consejos. Ya no a los que se irán ricos, sino a los que llegarán en 2015, pobres.
Recurrimos mejor a las metáforas. Tienen más sentido. Veamos, leamos, por qué tal aseveración: Lo más valioso no es lo que tengo, sino a quien tengo en mi vida. El que tiene fe en sí mismo no necesita que los demás crean en él. Lo bueno de los tiempos difíciles es que ahuyenta a las falsas amistades. El comienzo de la sabiduría es el silencio. Modérate. Decir mucho al hablar poco. Porque la depresión es: exceso de pasado. La ansiedad: premisa de futuro. Y vivir el presente, es estar en paz.
Si un huevo se rompe por el exterior la vida termina. Si se rompe por una fuerza interior la vida comienza. Los grandes cambios en la vida empiezan de adentro hacia afuera. Esto que ves soy yo, ni más ni menos. Un pedazo de ser, un trozo de humanidad, un puñado de risa, una cuota de locura, un pedazo de dulzura. Esto que ves soy yo, una mujer a veces niña, a veces infinito, a veces pasión, a veces libertad. Es todo lo que tengo, todo lo que soy. No es mucho pero es todo. Tengo ya simpatía, como para tener además belleza. Entre cientos de voces consejeras, solo escucha la de tu corazón. Se feliz a tu manera porque la felicidad no es única. Cada quien escribe su propia definición de felicidad.
Confía: él sabe a quién te pone en tu camino, por qué lo pone y por qué te lo aparta. Hoy reconoce la fuerza del creador. La humildad que viene de saber que siempre está ahí. La libertad no está en las alas, está en la mente. Existen dos tipos de personas: Las que te hacen perder el tiempo y las que te hacen perder la noción del tiempo.
La felicidad no depende de lo que tienes o de quién eres. Se basa únicamente en lo que piensas. No es lo que nos ocurre, sino como lo enfrentamos lo que determina nuestra conexión con el creador. Solo observa, no juzgues. No olvidemos nunca que el tiempo es muy lento para los que esperan, muy rápido para los que tienen miedo, muy largo para los que se lamentan y muy corto para los que festejan. Pero para los que aman, el tiempo es una eternidad.
No le deseo mal al que me desea mal. Al contrario, le deseo bien porque veo que se encuentra muy mal. Cada vez que te ocurra un sufrimiento, no lo guardes, deja que suceda pero no lo nutras. ¿Para qué hablar sobre él? Recuerda una de las leyes: que a todo lo que le das tu atención, crece. La atención es un elemento que ayuda al crecimiento, si prestas atención a algo, crece más.
No te equivoques, un hijo no está para cumplir tus sueños o ser lo que no pudiste ser. Nació para ser él. Déjalo volar y soñar para que llegue a ser feliz él mismo. Algunos aman el poder, otros tienen el poder de amar. Aquellos son los más.
Ni modo. Así son estas metáforas de la vida. Aprovéchelas con todo respeto, joven mandatario.