Roban armamento a la Policía de Jalisco
MÉXICO, DF, 7 de diciembre de 2014.-La Fiscal Especial de Investigación para la Atención del Delito de Secuestro, de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) capturó a un ex policía del DF, que se dedicaba a extorsionar a automovilistas en la Delegación Iztapalapa.
Guillermo Terán Pulido, fiscal anti secuestro de la PGJDF informó en conferencia de prensa que junto con otro cómplice el ex uniformado, que el 2006 ingresó al reclusorio de dicha entidad federativa por el delito de cohecho, operaba haciéndose pasar como policía y actuaba con otro cómplice.
Felipe C., ocupaba la placa y algunos aditamentos de su uniforme con los que trabajaba en el Estado de México para disuadir a los afectados. Su cómplice Lucio G., también amedrentaba a los automovilistas.
«El pasado mes de octubre, el afectado salió de un restaurante, localizado en calles de Barrio de San Miguel cuando fue interceptado por los indiciados, quienes se ostentaron como elementos policíacos y le indicaron que su vehículo contaba con problemas legales, por lo que le exigieron dinero para no perjudicarlo a él y sus familiares, cediendo a sus peticiones.
«Días después, la víctima recibió llamadas telefónicas donde los inculpados lo amenazaron con causarle daño si no les entregaba otra cantidad en efectivo, ante el temor de que cumplieran sus amenazas decidió darles su vehículo, no obstante, continuaron las llamadas extorsiones», explicó Terán en conferencia de prensa.
Para extorsionarlo por tercera ocasión, los presuntos delincuentes citaron al también comerciante bajo la amenaza de que tenía información de su familiar y lo hicieron trasladarse hasta la colonia Vicente Guerrero, en Iztapalapa, a donde iban a recoger el dinero, sin embargo, afectado solicitó apoyo de personal de la FAS.
Cuando recibían el dinero los detenidos, que arribaron al lugar a bordo de una camioneta Hummer, fueron detenidos por la policía.
Como probables responsables del delito de extorsión agravada en pandilla, ilícito por el cual podrían alcanzar una pena máxima de 18 años de cárcel, los detenidos fueron consiga adiós al Reclusorio Oriente.