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MÉXICO, DF, 10 de diciembre de 2014.- De acuerdo con el líder de los panistas en la Cámara de Senadores, Jorge Luis Preciado, el panorama económico para el país en 2015 será complicado y poco favorable, debido a la caída de los precios del petróleo y a la fluctuación del dólar, la consecuencia será desempleo y afectará los bolsillos de muchas familias.
“Se armó la tormenta perfecta, se cayó el precio del petróleo a 56 dólares, el dólar se está disparando, ya casi va llegar a los 15 pesos, la economía no está creciendo, no va a crecer este año serán 1.5 por ciento, la Reforma Fiscal ha ahuyentado muchas inversiones y entonces esto va a generar desempleo, va a generar conflicto, y por supuesto va a permitir que muchas familias no tengan ni lo suficiente para vivir decorosamente, mínimamente, y obviamente esto provoca que la gente tenga que buscar alternativas”, subrayó.
En este sentido, advirtió que una de las alternativas que terminan buscando las familias mexicanas es emigrar hacia los Estados Unidos; escenario que generó que hoy haya cerca de 11 millones de mexicanos en el país del norte, propiciando la desintegración familiar, drama por el que el legislador pasó dos veces en su vida, reveló durante su intervención en la inauguración del Primer Congreso de la Familia y Desarrollo Humano organizado por el Senado.
A mí me tocó pasar la frontera, cuando cumplí los 7 años, mi hermana de 9 años y yo pasamos por el desierto, caminamos unas 36 horas, pero finalmente nos reunimos como familia en los Estados Unidos y vivimos allá bastante tiempo. Finalmente yo a los 20 años tuve que hacer lo mismo, dejar a mi mujer y a mis hijos, y volver a cruzar la frontera para juntar dinero para acabar la carrera”, relató el legislador por Colima.
El líder de los panistas en la Cámara de Senadores, subrayó que además que de la coyuntura económica, también existe otra de seguridad y que el caso de las 43 personas desaparecidas de Ayotzinapa, es sólo la punta del iceberg, porque en Apatzingán, por ejemplo hay 3 mil huérfanos porque a los papás los matan o los secuestran.
“Pero además no solamente es el problema de la desintegración del núcleo familiar cuando se pierde al padre, que fue asesinado, o por la delincuencia organizada o por el Estado, sino el conflicto entre familias, donde los hijos de una familia asesinaron a los hijos de la otra familia y ya hay ahí un caldo de cultivo gravísimo en la zona de Tierra Caliente que me tocó visitar hace seis meses, donde familias enteras, que conviven en una misma comunidad”, reseñó el panista.