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MEXICO, DF, 18 de diciembre de 2014.- El año que termina ha sido bueno para los trabajadores al servicio del Estado, y el 2015 podría ser mejor, debido al cumplimiento puntual de la palabra y los acuerdos alcanzados en política laboral y sindical con el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto y el titular de la Secretaría de Hacienda, Luis Videgaray.
Así lo afirmó el presidente de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), Joel Ayala Almeida, quien al hacer un balance del trabajo en esta Central, sostuvo que además de concretarse la basificación de 22 mil 600 plazas para el Sector Salud, se alcanzaron importantes incrementos en las percepciones de los trabajadores.
El también senador de la República se refirió al programa para la basificación gradual a tres años de 63 mil servidores públicos del sector salud que no cuentan con seguridad social ni están en el tabulador general, iniciando en 2014 con la formalizaron 22 mil 600.
Destacó que hubo un acuerdo con la SHCP para abrir 10 mil nuevas plazas, también de manera gradual a tres años, en las áreas médica y paramédica del ISSSTE, de las cuales en 2014 se concretaron 4 mil.
Este crecimiento redundará en elevar la calidad y eficiencia de los servicios que prestan tanto la Secretaría de Salud como el ISSSTE, en beneficio de millones de mexicanos que acuden a esos centros de atención.
En cuanto a las prestaciones que experimentaron avance, Joel Ayala citó el caso de los vales de fin de año, pues el monto de los mismos no ha dejado de incrementarse desde 1998 en que se instituyó dicho apoyo cuando era de mil 200 pesos, hasta llegar a los 10 mil 500 pesos en 2014.
Comentó que en el año que está por concluir, la FSTSE y la SHCP convinieron aplicar una nueva prestación de ayuda a transporte para los servidores públicos de base por un monto de 200 pesos mensuales, la cual se aplicó al personal administrativo y de servicios generales.
El dirigente puntualizó que tales beneficios beneficiaron a los servidores públicos de menos ingresos y no a los funcionarios de mandos medios o altos, pues la intención del gobierno federal y de los dirigentes de los 86 sindicatos afiliados a la FSTSE fue pugnar por recuperar en lo posible el poder adquisitivo en ese sector.
Más adelante, insistió en que el diálogo respetuoso entre el gobierno y las representaciones laborales de los servidores públicos del país ha sido la base para que, sin causar quebranto al erario y entendiendo la limitaciones presupuestales, se avanzará en el mejoramiento de la calidad de vida de los trabajadores.