Cae El Cholo Palacios, presunto jefe de plaza de Guerreros Unidos
VERACRUZ, Ver., 28 de diciembre de 2014.- El vocero de la Diócesis de Veracruz, Víctor Manuel Díaz Mendoza, reconoció que el problema de la violencia que genera el narcotráfico ya alcanzó a la iglesia católica, por lo que calificó de lamentable la muerte del sacerdote Gregorio López Gorostieta, en el estado de Guerrero.
“Nosotros como miembros de la Iglesia católica, lamentamos la muerte del sacerdote Gregorio López Gorostieta, es de reconocerse que la iglesia también es vulnerable a la violencia generada por la delincuencia organizada”.
Díaz Mendoza detalló que para el próximo 31 de diciembre a las 12:00 horas se efectuará una misa especial en la Catedral de esta ciudad de Veracruz para las familias que han sufrido la desaparición o muerte de algún miembro.
“Vamos a elevar una oración por todas esas familias, será de especial que haremos esa oración vengan o no vengan esa familias a acompañarnos, incluyendo a los sacerdotes que han sido víctimas de la delincuencia”.
El vocero consideró que se debe ser optimistas para el 2015, por eso estamos pidiendo por la unidad en las familias, por lo que hacemos un exhortó a los feligreses católicos a convertirse y creer en la palabra Dios.
“Desafortunadamente muchas familias han perdido a un ser querido por acciones de la delincuencia organizada, ya sea por desaparición y muerte, estaremos orando por ellos”.
Así mismo, dijo que como Iglesia seguirá difundiendo la palabra de Dios y promoverán la denuncia para ir terminando con las acciones de la delincuencia organizada.
“Afortunadamente en este año no tuvimos sacerdotes que hayan recibido amenazas por parte de la delincuencia organizada, a diferencia del año anterior que si se dieron esos casos”.