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MÉXICO, DF, 1 de marzo de 2015.- Con el Sistema Nacional Anticorrupción los ciudadanos irán recuperando la confianza en las instituciones, pues es un instrumento que ayudará a revertir la impunidad que tanto lastima a México, aseguró el coordinador del PAN en la Cámara de Diputados, Ricardo Anaya Cortés.
Al aprobarse el dictamen que reforma y adiciona diversas disposiciones de la Constitución mexicana en materia de combate a la corrupción, el líder panista manifestó que no debe haber trabas para la revisión exhaustiva de los recursos públicos en los tres niveles de Gobierno.
De esta manera, el Sistema Nacional Anticorrupción cumplirá el propósito para el que fue creado, y los mexicanos podrán recuperar la confianza en las autoridades, señaló.
Anaya hizo hincapié en que los Diputados del PAN estarán atentos, hasta ver concluido el proceso de aprobación de su iniciativa presentada desde noviembre del año pasado.
“Cuando se trata del dinero de los ciudadanos, no debe haber diques, cortinas o pretextos que impidan saber cómo son utilizados los recursos por el Gobierno federal, por los gobiernos estatales o por los municipales”, recalcó.
El proyecto avalado por mayoría calificada en el Congreso de San Lázaro recoge las diversas iniciativas presentadas por todas las fuerzas políticas que la integran. Sus puntos esenciales para la efectividad de la reforma otorga mayores facultades a la Auditoría Superior de la Federación (ASF); el titular de la Función Pública será ratificado por el Senado; y especialmente se revisará el uso del dinero proveniente de la Federación, manejado por los estados y municipios.
El panista recordó que las entidades federativas reciben recursos del orden de 1.5 billones de pesos, para la realización de diversos proyectos de orden estatal y municipal, lo que representa la tercera parte del presupuesto total de la Federación.
Los ramos más importantes por el monto de las participaciones son el ramo 28 y el ramo 33. Si la reforma que crea el Sistema Nacional Anticorrupción es avalada en el Senado y los Congresos estatales, estos recursos podrán ser auditados, para beneficio de todos los mexicanos.
Consideró que el principal incentivo a la corrupción es la falta de control, vigilancia y fiscalización de la gestión pública. La experiencia en México ha sido que la ausencia de estos mecanismos, ha favorecido toda clase de conductas indebidas y de saqueo de recursos, que hasta hoy han quedado impunes.