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MÉXICO, DF, 8 de marzo de 2015.- En los últimos años, México ha desarrollado la institucionalidad para hacer realidad la equidad de género, con presupuestos y organismos a nivel federal, estatal y municipal, sin embargo es necesario pasar del dicho al hecho, coincidieron especialistas en la materia.
“Tenemos presupuestos con perspectiva de género, hay áreas en las instituciones, coordinaciones, unidades, fiscalías. Creo que en ningún otro tema, México ha desarrollado tanta institucionalidad en los últimos 15 años, pero tenemos una cultura social atorada”, aseguró el presidente del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), Ricardo Bucio Mujica, informa la agencia de noticias del Estado mexicano, Notimex.
Sostuvo que no hay prácticamente ningún indicador en donde haya una ventaja comparativa de las mujeres con respecto a los hombres, ni en lo económico, político, social o cultural, aunque en algunos casos se ha logrado paridad.
A su vez, la secretaria Ejecutiva del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Marcela Eternod, advirtió que los países que tienen confinadas a sus mujeres en el ámbito doméstico, haciendo tareas de cuidados y les niegan la posibilidad de estudiar, decidir y crecer, “se limitan”.
Reconoció que en México hay un compromiso político, presupuestal y programático para reducir las brechas de desigualdad, pues sin equidad “lo que perdemos es la aportación, el talento, el trabajo y las capacidades de cientos de miles de mujeres”.
En la medida en que se puedan desarrollar las muchas habilidades y talentos que tiene cada una de las personas, en la medida en que una mujer o una niña pueda decidir con libertad y atreverse a soñar, “vamos a ser un país más igualitario y feliz”.
En el mismo tenor, la representante de la sección de mujeres de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ana Güezmes, afirmó que sin equidad, México se está perdiendo de desarrollo, democracia “y una oportunidad de crecimiento y de liderazgo global que los y las mexicanas quieren y se merecen”.
De acuerdo con datos oficiales, en México hay 61.2 millones de mujeres, de las cuales, 63 por ciento de las mayores de 15 años de edad ha experimentado al menos un acto violento en algún momento de su vida; y de las que reportaron haber trabajado, la cuarta parte sufrió discriminación laboral.
En el país, 25 por ciento de los hogares son encabezados por una mujer, mientras que en materia de salarios, dependiendo de la actividad que desempeñen, reportaron percibir entre 3.0 y 27 por ciento menos que los varones por realizar actividades similares.
Según los datos, 42 por ciento de las mujeres es económicamente activa, mientras que en los hombres la cifra asciende al 76 por ciento, pero el trabajo no remunerado que realiza el sexo femenino, principalmente doméstico y de cuidados de niños y adultos mayores, representa 19.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
En cuanto a la presencia femenina en el sistema político, las cifras reflejan que en el Ejecutivo, 12.5 por ciento de titulares de las dependencias son mujeres; mientras que en las cámaras de Diputados y Senadores alcanzan 37 y 33 por ciento, respectivamente.
En tanto, en el Poder Judicial, con datos de 2012, el 18 por ciento estaba compuesto por ministras de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y un dato considerado “alarmante” es que en el nivel municipal sólo 7.0 por ciento es encabezado por una mujer.
El Día internacional de la mujer, que se celebra este domingo 8 de marzo, representa para la secretaria Ejecutiva de Inmujeres una conmemoración “que nos dice: ojo, mucho cuidado, hemos avanzado, pero nos falta mucho, porque los hombres nacen con un conjunto de privilegios que no tienen las mujeres”.
Aseguró que se debe de cambiar, avanzar, evolucionar “y reconocer que hombres y mujeres somos iguales en capacidades, en deseos, en aspiraciones y debemos ser iguales en las oportunidades y en los resultados”.
En materia política, refirió que para el Inmujeres el presente año deberá ser de logros, al entrar el vigor la ley que establece la postulación de 50 por ciento de candidatos del sexo femenino, “pero también de grandes desafíos y retos, para hacer que lo que está en la ley aterrice en la realidad y se cumpla”.
Al respecto, la representante de ONU Mujeres, Ana Güezmes, refirió que en materia política, la experiencia señala que cuando se tiene al menos el 30 por ciento de mujeres en el ámbito de la participación política, empieza a haber cambios.
“Lo que hemos demostrado es que cuando una mujer llega a la política, pues puede cambiar la mujer; pero cuando muchas mujeres llegan, puede cambiar la política”, afirmó.
Expresó su confianza de que en las elecciones intermedias, que se celebrarán en junio próximo, pueda haber un cambio importante en México en ese sentido, y recordó que en los procesos comiciales registrados el año pasado en Nayarit y Coahuila, el crecimiento de la presencia de las mujeres “ha sido muy alto”.
En materia de salud, la funcionaria de Inmujeres hizo notar que México tiene en la actualidad un grave problema de embarazo en adolescentes, pues más de 51 por ciento de las que han iniciado su vida sexual se encuentra en ese caso, “porque no hemos contribuido en decirle a las niñas que su destino no es solo la maternidad”.
“El problema del embarazo en las adolescentes tiene mucho que ver con las aspiraciones que deben tener las niñas para hacer una vida plena, para poder decir qué quieren ser, qué quieren hacer y cómo quieren vivir”, refirió.
Al respecto, la doctora Josefina Lira Plascencia, quien ocupa la primera secretaría del Colegio Mexicano de Especialistas en Ginecología y Obstetricia, hizo énfasis en la necesidad de incluir la educación sexual en los planes de estudio.
Comentó que algunos países europeos iniciaron desde 1950 con este tipo de programas, y, por ejemplo, en Holanda se habla de sexualidad desde el nivel preescolar “y de ahí lo siguen hasta la etapa de adolescentes”, con información sobre el riesgo de las infecciones de transmisión sexual.
La especialista comentó que en México, si se registran embarazos en adolescentes de entre 15 y 16 años, “lo ideal sería informarlos dos o tres años antes de que inicien su vida sexual”.
En el ámbito de la discriminación, el presidente de la organización Pacto Global, Gustavo Pérez, mencionó que se presenta desde la esfera judicial, en la que cuando hay una mujer detenida se comenta “pues que habrá hecho” para estar en esa condición, hasta en simples comentarios de la forma en que manejan sus vehículos.
Recordó que en un viaje a Monterrey, Nuevo León, coincidió en un vuelo con un grupo de representantes de alguna empresa, dentro del cual iba sólo una mujer.
Relató que al momento del aterrizaje, el avión en que viajaba tuvo que hacer una maniobra para volver a elevarse debido a una instrucción de la torre de control, en lo que él consideró algo de rutina, pero que el grupo de personas empezó a criticar.
Dijo que la piloto del avión explicó desde la cabina la razón por la que había realizado la maniobra, y al percatarse de que era una mujer, el grupo de personas empezó a hacer bromas de todo tipo, que incluso fueron compartidas por su compañera, bajo el argumento de que quien estaba a cargo del vuelo “es una mujer”.