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MEXICO, DF a 9 de marzo de 2015.- Organizaciones y académicos buscarán dar marcha atrás a la nueva Ley General de Aguas, la cual busca que particulares se hagan cargo del cobro del suministro de este recurso natural.
En conferencia de prensa, Nathalie Seguin, de la Red de Acción por el Agua en México, aseguró que la intención de esta iniciativa es de frenar el acceso gratuito de millones de personas al recurso hídrico, así como de obstaculizar la información real de cómo serán aplicadas estas acciones por parte del Gobierno federal.
“Se trata de tergiversar el acceso al derecho humano al agua con esta nueva ley, la cual tendrá una función principal, no dar a conocer los verdaderos alcances que dará la Conagua a las empresas que utilizan este recurso.
“Las tarifas que se impondrán serán completamente desconocidas para cualquier tipo de persona, esto es que el subsidio será más restringido para aquellas comunidades que en verdad necesitarán el agua”, dijo Seguin.
Recordó que el Gobierno mexicano firmó un acuerdo internacional para otorgar a cualquier persona de este líquido, ya que está considerado como un derecho humano universal para esta situación.
Por su parte, Alessia Kachadourian, integrante del posgrado de hidrogeología de la UNAM, refutó las versiones de Conagua sobre la supuesta escasez de agua que padece México.
La académica confesó que su área de investigación cuenta con la información científica necesaria para demostrar que el líquido se encuentra mal distribuido con el objetivo de beneficiar a empresas de gran nivel.
“Los supuestos estudios del Gobierno no tienen ningún sustento científico, hay que dejar muy en claro que sí hay agua en México y los balances de Conagua a lo largo de la historia están mal hechos, con esto se basan para argumentar que hay escases, en Hidrogeología de la UNAM ya se comprobó lo contrario.
“La Conagua no tiene sustento científico para decir estos hechos y emitir la alarma en la población general”, comentó Kachadourian.
Agregó que la dependencia que coordina David Korenfeld aún utiliza estrategias usadas desde los años 40 para dar sus dictámenes, así como la utilización del agua para empresas automotrices que han sobreexplotado mantos acuíferos por años.
“Desde 1948 no hay base de la sobre explotación de mantos, la Conagua dice que no hay agua y los acuíferos que están sobre explotados desde hace 30 años son para empresas automotrices, desde 2009 hay 13 millones de personas sin acceso al agua, esto nos hace pensar en si debemos seguir confiando de la capacidad técnica de Cobagua.
“Lo alarmante es que se sigue sin resolver este problema y es porque el gobierno no ha invertido en el conocimiento científico, no existe una estación de monitoreo de cada acuífero. En otras palabras se toman decisiones sin sustento científico y se basan desde el año 40”, señaló.
Finalmente, adelantaron que se darán manifestaciones públicas para evitar que esta iniciativa, presentada la semana pasada en la Cámara de Diputados, sea avalada, por lo que invitaron a la población a unirse a una concentración a las afueras de San Lázaro para ejercer presión en este tema.