El concierto del músico/Rodrigo Aridjis
Daños Colaterales
La industria farmacéutica de Estados Unidos es una de las más reguladas del mundo, en aquel mercado es posible decir que un producto es mejor o más eficiente que otro presentando a la competencia en pantalla; los abogados de las compañías están prestos a recetar demandas y por ello se cubren muy bien las espaldas, lo que dicen lo justifican y lo sostienen con investigación.
Así, la regulación no se impone por la legislación únicamente, los mismos departamentos legales de las compañías han obligado a que su publicidad cubra cualquier frente de posibles demandas por el uso de sus productos, demandas de otras compañías pero también, y esto es lo importante, por parte de los que usan esos productos y de quienes los prescriben. Esta dinámica desliza la regulación del estado a la autorregulación: compañías-abogados-clientes.
El mercado es vasto y seguro. Miles de millones de dólares en ganancias para paliar padecimientos a un número cada vez mayor de afectados por enfermedades como la diabetes, la hipertensión, insuficiencias renales, hepáticas y la depresión. Los productores publicitarios de estos medicamentos han tenido que recurrir a alargar el tiempo de duración de sus spots, la mayoría de un minuto.
Menos tiempo no les alcanza para expresar la letanía de posibles efectos secundarios y reacciones adversas por el uso de los medicamentos. También por ley lo deben decir de manera clara, la información no puede ser proporcionada de manera tan apresurada que no sea entendible. Así, el comercial de un medicamento para la diabetes se llena de imágenes de gente feliz, viviendo su vida de manera normal, sonriendo.
Después de describir todas sus ventajas se expresan las posibles consecuencias. No tome el medicamento si es alérgico a los componentes, se pueden presentar reacciones serias y severas como: sangrado de nariz, irritación en los ojos, parálisis total o parcial del rostro, dolores intensos y agudos en el pecho, sensación de presión alta, mareo, náusea, vómito y en casos extremos la muerte. Por favor, si presenta cualquiera de estos síntomas suspenda el uso y acuda a su médico de inmediato.
Ahora que el INE se queja del tono de confrontación que partidos políticos, ahora que es el censor de los contenidos sobre lo que pueden o no decir los spots, sería bueno que aplicara algo parecido a la regulación a la que las farmacéuticas están obligadas; hacer del conocimiento del público las posibles consecuencias de votar por un partido.
Así, antes de que termine un spot de promoción podrían decir: Votar por este partido puede resultar en reacciones adversas como; graves conflictos de interés sobre todo en transacciones inmobiliarias, despilfarro de recursos públicos de grupos parlamentarios en fiestas con prostitutas, miembros del crimen organizado infiltrados en puestos como alcaldes y sus siniestras consecuencias, peligrosos deslizamientos a posturas fascistas emanadas de severa paranoia política… si se llegaran a presentar cualquiera de estos efectos indeseables, no se alarme, hay muy poco que usted puede hacer y lo que es más, usted sabe muy bien que no hará nada para remediarlo.