Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
Mujeres para la historia
El seis de abril de l952, durante su campaña presidencial, don Adolfo Ruiz Cortines ofreció a la mujer mexicana darle el voto. Lo hizo oficial, ya como mandatario, el 17 de octubre de l953. Hoy esa ley –“hay que respetar las leyes, siempre que éstas sean respetables”– se aplica, pero aún no equitativamente. La misoginia política prevalece, pese a que las féminas has demostrado saber más que muchos de ellos.
Tienen la virtud, entre otras, de dar su vida para dar la vida: ser madre. No obstante desde su inicio como Eva –la primera mujer en la historia– fue acusada por el primer hombre, Adán, de ser culpable de sus errores. Al comer la manzana y reprenderlo el Creador, respondió: fue Eva, Señor, la culpable. Y así, sucesivamente se le han atribuido todos los errores masculinos.
En responsabilidad oficial y privada destacan. No se les acusa de corrupción o malos manejos. Aun cuando sus compañeros las obligan asumir responsabilidades ante el pueblo: Fue Eva. No yo, diría el de la Casa Blanca
En éste Mujeres para la Historia, ejemplos de vida en el mundo.
Ana Frank. Niña judío alemana, 1929-1944, símbolo del holocausto. “No veo la miseria que hay. Sino la belleza que aún queda”. Permaneció escondida con su familia en el desván de una casa de Ámsterdam durante más de dos años, hasta ser finalmente descubiertos por la Gestapo. Ana y su hermana Margot fueron enviadas al campo de concentración de Bergen-Belsen donde murieron de tifus un mes antes de la liberación del campo. Mientras estuvo escondida, Ana escribió su famoso Diario.
Ada Lovelace. Eminente matemática inglesa, 1815 -1852, pionera en el campo de la programación y computación. Creó un remoto antecesor del software y previó todas sus posibles aplicaciones en el entorno de la sociedad victoriana de su época. “Nadie sabe el potencial que encierra este poderoso sistema; algún día podrá llegar a ejecutar música, componer sinfonías y complejos diseños gráficos”.
Alfonsina Storni. Poeta argentina nacida en Suiza, 1892-1938, icono de la literatura posmodernista. Con una infancia difícil y con carencias, y luego una vida con recurrentes enfermedades, su poesía está impregnada de lucha, audacia, amor y de reivindicación del género femenino. Terminó su vida suicidándose sumergida en el mar. En Alfonsina y el mar: “Te vas Alfonsina con tu soledad. ¿Qué poemas nuevos fuiste a buscar? Una voz antigua de viento y de sal, te requiebra el alma y la está llevando. Y te vas hacia allá, como en sueños, dormida, Alfonsina, vestida de mar”.
Aung San Suu Kyi. 1945. Fue declarada presa de conciencia por Amnistía Internacional. Esta birmana ha vivido retenida desde 1989. Estudió en Oxford y fue líder de la oposición democrática en su país. Nobel de la Paz en 1991, no pudo recogerlo hasta junio de 2012. Ese año, fue elegida al Parlamento birmano. Diría entonces: “Nosotros todavía somos prisioneros en nuestro propio país”.
Alexandra David-Néel (1868-1969) Fue una de las más grandes viajeras de todos los tiempos. Orientalista, cantante de ópera y escritora, esta francesa, fue la primera mujer occidental en visitar Lhasa, en el Tíbet, en 1924, y recibida por el Dalai Lama. Viajó por India y China. Escribió más de treinta libros sobre religiones orientales. Simpatizante de las ideas anarquistas, estudió en Túnez el Corán y vivió como una musulmana.
Audrey Hepburn Actriz anglo belga, 1929-1993. Hablar de Audrey Hepburn es hablar de estilo y elegancia. De apariencia frágil, nos conquistó desde la pantalla. Todos la recordamos en el amor montada en una Vespa en vacaciones en Roma. De madrugada por las calles de Nueva York. En Desayuno con diamantes y en My fair lady. Dedicó a los más pobres los últimos años de su vida.
María de las Mercedes Avila Govea, periodista y escritora mexicana (1967) Refiero una de sus múltiples frases que la pinta de cuerpo entero: “La belleza de una mujer crece con el pasar de los años.” Su libro más leído: “Ansiedad por la vida”, que recuerda el voto a la mujer, dado por Ruiz Cortines. Y el más solicitado “El amor a mi hija”. Tiene ingenio.
Rosario Castellanos, Poeta nacida en Comitán, Chiapas. (1925-1974). Murió electrocutada accidentalmente en Israel, donde era nuestra embajadora, escribió múltiples libros. Destaca Balún Canan, en donde narra la añeja explotación de los indios en Comitán. Sobresalen: “Mujer que sabe latín”, sobre los obstáculos para el avance de las mujeres. “Oficio de tinieblas” en donde cuenta la sublevación chamula y la crucifixión de un indígena. Entre otros muchos. Sobrevive su único hijo, escritor, Ricardo Guerra, Castellanos.
Bertha Von Suttner. Nacida en Checoslovaquia, 1843-1914, fue la primera persona que recibió el Nobel de la Paz. En una época en la que primaban los principios militaristas, escribió el libro “Abajo las armas”, una de las obras que más ha influido en el movimiento pacifista moderno. “Después del verbo amar, el verbo ayudar es el más hermoso del mundo”.
Benazir Bhutto, Pakistán, 1953-2007 Primera mujer que ocupó el cargo de Primer Ministro en un país musulmán, que dirigió su país durante dos legislaturas. Su nombre está asociado a la democracia de Pakistán. Impulsora de un estado seglar, de la tolerancia en una sociedad sectaria y de las libertades fundamentales. Pero la llegada al poder de una mujer era contraria a los principios del Islam: murió en un atentado. “Para hacer la paz, se debe ser un líder sin intereses. Para hacer la paz, uno debe comprometerse“, diría.
Concepción Arenal. España, 1820-1893. Pensadora, escritora y periodista, pionera en la defensa de los derechos de las mujeres. Fue la primera visitadora de cárceles de mujeres. “La sociedad no puede asentarse bien sobre la resignación y la generosidad, sino sobre la justicia”.
Clara Campoamor. Política española, 1888-1972, defensora de los derechos de la mujer y principal impulsora del sufragio femenino en España, logrado en 1931, y ejercido por primera vez por las mujeres en las elecciones de 1933. “La libertad se aprende ejerciéndola”.
Dian Fossey. Zoóloga estadounidense, 1932-1985, famosa por su labor científica y conservacionista con los gorilas. Su libro Gorilas en la niebla fue llevado al cine. Murió a machetazos por supuestos furtivos apoyados por las autoridades ruandesas. Las últimas palabras de su diario encontrado decían: “Cuando te das cuenta del valor de la vida, hay que mirar menos al pasado y concentrarse en la preservación del futuro”.
Edith Piaf. Cantante francesa, 1915-1963. Criada por su abuela, que regentaba un prostíbulo, cantaba canciones desgarradoras en las calles, acompañada por su padre. “Unos ojos que hacen bajar los míos, una sonrisa perdida en su boca… Cuando me toma en sus brazos, me habla bajo… Unas noches de amor interminables, una gran felicidad… Los problemas, las tristezas desaparecen. Felices, felices a morir…Yo veo la vida en rosa”, canción extraordinariamente bella que embruja a Bety, mi amor.
Florence Nightingale. Tras servir en la Guerra de Crimea como asistente de guerra, esta inglesa, 1820-1910, se convirtió en pionera de la enfermería moderna, así como creadora de un modelo conceptual que defendía la necesidad de un entorno saludable para la mejora de los pacientes. Primera mujer en ser admitida en la Royal Statistical Society inglesa gracias a sus conocimientos matemáticos que la llevaron a hacer grandes avances en epidemiología y estadística sanitaria.
“Lo importante no es lo que hace la mujer por el destino, sino lo que nosotros hacemos por ella y él.” Añadiríamos