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MÉXICO, DF., 4 de agosto de 2015.- A un año del derrame de 40 mil metros cúbicos de sulfato de cobre acidulado a los ríos Bacanuchi y Sonora, provocado por la mina Buenavista del Cobre, la Comisión Presidencial para la Atención Inmediata y Permanente de la población afectada presentó este martes el balance de acciones en materia de medio ambiente, salud y agricultura.
En rueda de prensa, los funcionarios federales que integran la Comisión informaron que los recursos destinados a la fecha para el resarcimiento a la población afectada por el derrame ascienden a mil 140 millones de pesos. La suma representa una derrama aproximada de 10 veces el PIB de los siete municipios que integran esa región, informó Profepa en un comunicado.
Al presentar un balance de la actuación del Fideicomiso Río Sonora expresaron que el monto de recursos destinados para el apoyo de la población afectada se aplicó a partir de septiembre de 2014.
Explicaron que los mil 140 millones de pesos se aplicaron para el resarcimiento económico directo a la población (otorgados mediante pagos en efectivo, cheques o tarjetas de débito), rehabilitación de pozos, instalación de tinacos en todas las casas que reportaron algún tipo de afectación vinculada con el derrame.
Con los recursos del fideicomiso, explicó el subsecretario Lacy, también se contrató a un consorcio de instituciones académicas, nacionales y estatales, coordinadas por la UNAM, para la realización de un diagnóstico ambiental de la zona del Río Sonora y que sirve de base para el Programa de Remediación.
Dicho diagnóstico en su primera etapa implicó una inversión de 58 millones de pesos.
En su oportunidad, Mikel Arriola, titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, informó a nombre de la Secretaría de Salud que las acciones se han concentrado en tres fases:
1.- Atención médica y resarcimiento de daños a la salud de la población afectada.
2.- Regularización del abasto de agua potable.
3.- Establecimiento de un sistema de vigilancia epidemiológica y ambiental de mediano y largo plazo.
Atención médica
En cuanto a la atención médica integral, reportó que se ha atendido el cien por ciento de los 360 casos detectados con daños en su salud, siendo las principales afecciones dermatológicas (80 por ciento), gastrointestinales (7 por ciento), males oftalmológicos (4 por ciento), neurológicos (3 por ciento) y el resto otros padecimientos.
Por lo que corresponde al muestreo de los metales pesados en el agua, el titular de Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) exhibió evidencias científicas de que el líquido de los pozos reabiertos cercanos a los ríos y de la red pública municipal se encuentra dentro de la NOM 127.
Destacó que muestrea (dos veces por mes) de manera permanente la calidad del agua de los 26 pozos reabiertos, y entregados para su operación a los municipios, los cuales representan el 93 por ciento del abasto que se tenía antes del derrame.
Arriola anunció que con fondos del Fideicomiso durante el mes de septiembre de 2015, se comenzará la construcción definitiva de la Unidad de Vigilancia Epidemiológica y Ambiental de Sonora (UVEAS) en el municipio de Ures.
Reparación
El procurador Federal de Protección al Ambiente, Guillermo Haro Bélchez, explicó que el avance en la remediación incluye la totalidad de Zona 1, la cual comprende el trayecto entre el punto del derrame al pie del represo Tinajas 1, hasta el kilómetro 30 ya en el Río Bacanuchi.
En esta acción, precisó, se retiraron mil 302 m3 de suelo contaminado, el cual fue acopiado en un sitio especialmente construido para ello, al cual se le instaló una geomembrana para evitar cualquier infiltración.
Indicó que concluyeron las obras de construcción de las presas de contingencias para el control de avenidas extraordinarias y derrames en los represos Tinajas 1 y 2, las cuales permitirán enfrentar sin riesgos los efectos de la peor precipitación pluvial en 10 mil años.