Oran por la paz en el Centro de Chilpancingo
MÉXICO, DF, 9 de agosto de 2015.- A casi un mes de la fuga de Joaquín Guzmán Loera del Penal de Máxima Seguridad de El Altiplano, Estado de México, la eficacia del estado mexicano está en entre dicho, afirmó el presidente del Senado, Miguel Barbosa Huerta, ya que apuntó, aún no está claro cómo ocurrieron los hechos.
“Las autoridades no han sido capaces de determinar hasta qué nivel de servidores públicos debe llegar el deslinde de responsabilidades, quiénes están libres de culpas y sospechas, o cuáles cambios son necesarios en la administración gubernamental tras los hechos ocurridos en julio pasado”, manifestó el legislador a través de un posicionamiento emitido este domingo.
En este sentido, Barbosa Huerta insistió que antes de que el Ejecutivo federal presente su Tercer Informe de Gobierno, deben ofrecer resultados satisfactorios o proceder a hacer ajustes y relevos en toda la cadena de mando responsable de la custodia de Guzmán Loera y advirtió que el gobierno no puede suponer que con el paso de los días el hecho quedará en el olvido.
“La estrategia de control de daños ha atemperado la tormenta, pero dista mucho de haberla eliminado; cuánto tiempo tiene que esperar más la sociedad para que el Gobierno articule una respuesta a los cuestionamientos que inundan la opinión pública”, apuntó el coordinador de la bancada perredista.
Por último, Barbosa acentuó que las declaraciones realizadas por el presidente Enrique Peña, quien aseguró que sería imperdonable que se escapara” Guzmán Loera, ahora son palabras que “pesan como lozas en la credibilidad” de esta administración.
“El Poder Legislativo Federal, en estricto apego a sus funciones, se mantendrá vigilante y demandante del desarrollo de esta investigación y de ninguna manera debe participar en una simple estrategia de control de daños”, concluyó el senador del PRD.