Revira Fernández Noroña ante amago de Trump sobre aranceles
MÉXICO, DF., 1 de diciembre de 2015.- El Pleno del Senado de la República aprobó con 74 votos a favor y 13 en contra en lo general y en particular la Ley de Transición Energética al desechar 21 reservas realizadas y turnó el dictamen a San Lázaro que como Cámara de origen, deberá ratificar los cambios realizados por la colegisladora.
En una acalorada discusión, la senadora del PRD, Dolores Padierna, señaló la ausencia de convocatoria a los miembros de su grupo parlamentario, hecho que calificó de “artimañas” para excluir a la bancada de la dictaminación; en contraste el presidente de la Comisión de Energía, el priista David Penchyna, resaltó que los miembros del sol azteca fueron citados en tiempo y forma pero no acudieron.
Entre las modificaciones al dictamen turnado de San Lázaro destacó la hecha al artículo Séptimo transitorio que establece que los recursos del Fondo para la Transición Energética y el Aprovechamiento Sustentable de la Energía establecido en la Ley para el Aprovechamiento de Energías Renovables y el Financiamiento de la Transición Energética, se aportarán a los fondos que se señalen en el Presupuesto de Egresos de la Federación del año en que la ley entre en vigor.
El pilar de la legislación serán los Certificados de Energías Limpias (CELs), que se incluyen en la Ley de Transición Energética para ser adquiridas por industrias hidroeléctricas, nucleares y cogeneradoras eficientes a partir de marzo del año entrante para impulsar el desarrollo del sector y al mismo tiempo disminuir los costos de la energía eléctrica.
De acuerdo con información de la Subsecretaría de Electricidad de la Secretaría de Energía el Gobierno tiene en marcha la primera licitación de entre 4 a 6 millones de certificados que comprará la Comisión Federal de Electricidad (CFE), mismo que detonará entre 40 mil y 80 mil millones de pesos hacia 2018.
Además se precisa un precio máximo para los CELs, calculado por la Comisión Reguladora de Energía que en los primeros años que no podrán sobrepasar las 60 Unidades de Inversión (UDIs).
Se anexa también un mecanismo flexible que se utilice ante coyunturas adversas y una solicitud al órgano regulador, a la CRE, para establecer otro transitorio de sanción que dé flexibilidad a los sujetos obligados, en cuanto a la aplicación de los certificados de energía limpias.
En los cambios estéticos se cambia el nombre de los fondos, para quedar fondos para la Transición Energética y el Aprovechamiento Sustentable de la Energía; cambia el término “energía renovable” por el de “energía limpia” y generación distribuida por “generación limpia distribuida” y precisa el concepto “usuarios de patrón de alto consumo”.
La iniciativa se enmarca en la legislación secundaria que deriva de la reciente reforma constitucional en materia de energía, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 20 de diciembre de 2013 y debió ser aprobada el 20 de diciembre de 2014.