Revira Fernández Noroña ante amago de Trump sobre aranceles
CIUDAD DE MÉXICO, 17 de marzo de 2016.- En menos de tres años, el Gobierno de Enrique Peña Nieto y sus aliados sepultaron una de las conquistas históricas más caras del pueblo mexicano, la nacionalización del petróleo, y con su Reforma Energética sembraron desolación, desempleo y desesperanza, acusó el diputado Julio Saldaña Morán.
En el marco del 78 Aniversario de la Expropiación Petrolera, se informó en un comunicado, denunció ante el Pleno de la Cámara de Diputados que esta celebración se convirtió en un acto hipócrita por parte de la actual administración federal, pues en poco tiempo quebró a la que un día fue una empresa orgullosamente mexicana, Petróleos Mexicanos (Pemex).
Hoy, dijo, este gobierno tiene prácticamente en remate hasta el último tornillo de esta empresa, luego de que durante el proceso de imposición de su Reforma Energética se cansó de decir, con sus seguidores, que no se vendería uno sólo.
De hecho –agregó- la contrarreforma energética de Peña Nieto, su partido y sus aliados es el más grande fraude perpetrado contra los mexicanos en los últimos años, pues ni de lejos se alcanzará la restitución de reservas al cien por ciento, la producción de tres millones de barriles diarios de petróleo que supuestamente se alcanzaría en 2018, ni las inversiones, las transferencias de tecnología, ni los empleos pronosticados y prometidos.
Todo lo que se tiene es la desaparición de recursos petroleros obtenidos durante décadas; reducción de ingresos fiscales provenientes del sector petrolero; mayor desempleo, desolación y desesperanza particularmente en estados petroleros como Campeche, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz, y, en paralelo, el gasto suntuoso de un gobierno que se niega a renunciar a sus privilegios.
Lo que tiene el país es la privatización de toda la cadena de producción de hidrocarburos, señaló, desde la exploración y extracción hasta la venta al público en general; una consecuente vulnerabilidad nacional en materia energética; una cada vez mayor ausencia de contenido nacional en todo el proceso de producción, y unos precios bajos y competitivos cada vez más lejos.
Por ello, afirmó el legislador veracruzano, “el PRD siempre ha sostenido que no es necesaria una Reforma Energética, sino el fortalecimiento de Pemex mediante un cambio de régimen fiscal. Es necesario rectificar el camino y explorar conjuntamente los cambios legales que conduzcan al rescate de Pemex”.