Asume nuevo director de Instituto de Investigaciones Filosóficas de UNAM
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de mayo de 2016.- La construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) no será una carga para el erario público ya que su esquema de financiamiento le permitirá allegarse de recursos propios y de bonos colocados en los mercados de capitales, informa Rosa Náutica, agencia especializada en aviación.
A través de operaciones financieras en esos mercados, se obtendrán los financiamientos que se vayan utilizando conforme avance la obra y sin tener que pagar tasas de interés, aseguró el director general del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, Federico Patiño Márquez.
“Es como una tarjeta de crédito y en la medida que vamos utilizando esos recursos para financiar la obra se van haciendo refinanciamientos de largo plazo a través del mercado de capitales emitiendo bonos.
“Le prepagamos a los bancos, vuelven a abrir la línea y así sucesivamente vamos agotándola y la vamos cambiando por bonos en el largo plazo”, explicó a un grupo de empresarios con los que se reunió hace un par de semanas.
“Básicamente, el financiamiento consiste en una línea de crédito revolvente y luego el refinanciamiento a través de la colocación de bonos en los mercados internacionales”.
Así es como funciona el esquema que se ha diseñado y con eso vamos a poder captar entre 6 mil y 7 mil millones de dólares. El resto, dado que el accionista es el gobierno federal, son recursos fiscales, precisó.
Este es un esquema casi soberano, porque no tenemos la garantía del gobierno federal. Si bien somos una empresa paraestatal, ese esquema no tiene garantía del gobierno federal, es decir, ni siquiera es deuda pública porque es una venta real de los flujos futuros.
Patiño Márquez indicó que además se buscará financiamiento a través de acciones público–privadas o concesiones, para tres o cuatro proyectos importantes dentro de toda la obra del NAICM, con lo que participarán también las pequeñas y medianas empresas.
La obtención de recursos propios se logra, explicó, mediante un esquema similar a lo que se hizo con la construcción de la terminal 2 del actual aeropuerto de la ciudad, que fue utilizar el flujo excesivo del aeropuerto, básicamente a través de la TUA.
Aproximadamente 40 por ciento de los pasajeros pagan la Tarifa de Uso de Aeropuerto (TUA) y de esos 50 por ciento son extranjeros.
Esto nos permitió llevar a cabo una operación en los mercados de capitales y Pudimos obtener los primeros 3 mil millones a través de una línea de crédito revolvente con 13 bancos y la vamos utilizando en la medida como va avanzando la obra.
“No pagamos tasa de interés al momento que la usemos y la vamos usando como va avanzando la obra”, reiteró.