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CIUDAD DE MÉXICO, 23 de mayo de 2016.- Para mejorar la justicia cotidiana en el ámbito laboral, el Gobierno de la República trabaja en cuatro vertientes para lograrlo: las Zonas Económicas Especiales (ZEE), el Programa de Reactivación Económica y Desarrollo Productivo de los Estados de Campeche y Tabasco, nuevos esquemas para la formalización de jornaleros agrícolas y convenios para la ejecución de acciones en la materia.
Al atestiguar la firma de 32 convenios, el presidente Enrique Peña Nieto destacó que en tres años la tasa de la informalidad laboral se redujo en 22 entidades federativas, por lo que reconoció a los gobiernos estatales por estos avances y llevar a la práctica los compromisos asumidos en favor de la formalización del empleo.
El titular del Ejecutivo federal respaldó lo dicho por el titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), Alfonso Navarrete Prida, y el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Mikel Arriola Peñalosa, sobre que un empleo formal además brinda importantes beneficios al trabajador y su familia.
Resaltó que entre las prestaciones de un empleo formal los trabajadores cuentan con seguros de riesgos de trabajo, enfermedades y maternidad, invalidez y vida, retiro, cesantía en edad avanzada, vejez, financiamiento para la vivienda y guarderías.
“Un empleo formal genera un impacto positivo en la economía (…) se estima que el 40 por ciento de los trabajadores que laboran en el sector formal generan el 76 por ciento del Producto Interno Bruto”, sostuvo en durante su intervención en un acto celebrado en el Patio de Honor del Palacio Nacional.
Al referir la cifra dada a conocer por el IMSS que en abril se generaron 82 mil 500 empleos formales, sumando un total 18.2 millones afiliados, el Primer Mandatario resaltó que representa el mayor aumento de empleos permanentes para un mes de abril desde que se tiene registro.
Esta cifra se traduce que en los primeros 41 meses de su gobierno se han generado un millón 940 mil nuevos empleos formales, el mayor incremento para un periodo similar en cualquier otra administración.
Aunque el Inegi informó que en el primer trimestre de este año la tasa de la informalidad laboral se ubicó en 57.4 por ciento de la población ocupada, reconoció que son esfuerzos que deben llevar a una mayor formalización en el país.
Si bien hay entidades donde más del 70 por ciento está en la formalidad, en otros estados la informalidad alcanza el 80 por ciento.
En otra perspectiva, de haberse mantenido la tasa de informalidad de hace tres años con el crecimiento del mercado laboral, hoy habría casi 700 mil personas adicionales trabajando fuera de la formalidad.