Denuncia oposición que Morena legisla por medio de fe de erratas
CIUDAD DE MÉXICO, 2 de agosto de 2016.- El gobierno priísta–pvemista perdió ya todo rubor y decidió ignorar los reclamos de la población por la escalada de precios que inició en los energéticos y, sin importarle ya su imagen por el “gasolinazo”, aplicó otro aumento en tarifas eléctricas, como si tuviera mucha prisa por consumar el “gran robo del siglo”, denunció el diputado Julio Saldaña Morán mediante un comunicado.
Refirió que eso y no otra cosa significa que, a pesar de su disponibilidad de recursos y el descrédito que les acarrea políticamente, esos partidos y su gobierno hayan decidido asestar otro ataque al poder adquisitivo de la población con el encarecimiento de la gasolina, el diésel y el servicio eléctrico, lo que se reflejará negativamente no sólo en su consumo directo, sino también a través de diversos productos y servicios que requiere.
Es decir, a priistas y pevemistas les importa ya un comino su imagen por la promesa incumplida de que la reforma energética traería combustibles y electricidad más baratos y de mejor calidad, y ahora avanzan abiertamente en sentido contrario.
Los dirigentes de esos partidos –dijo Saldaña Morán– parecen actuar como si ya estuvieran resignados a perder el poder el próximo año y en el 2018 o como si creyeran que sólo con “programas sociales limosneros” y trucos estadísticos del INEGI lo conservarán, por lo que, al tiempo que simulan combatir la corrupción con el ex director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y ahora nuevo dirigente priista, maximizan las utilidades de esta empresa –ya pulverizada en varias– para obligarla a compartirlas mediante la asociación con ciertos empresarios.
Es algo parecido a lo hecho con Pemex, empresa a la que se obliga a rescatar a empresarios ineptos y defraudadores al tiempo que se les entrega los activos más valiosos. “CFE debe informar cuántas asociaciones empresariales lleva de enero a la fecha, cuál ha sido la aportación de cada socio y cómo se reparten las utilidades”, demandó Saldaña.
Para suponer que priístas y pevemistas quieren hacer lo mismo con CFE que lo que hacen con Pemex, Saldaña Morán enumeró los siguientes hechos:
Cada una de las nuevas empresas socias de CFE tendrá su propio Consejo de Administración y en él participarán cuatro representantes del gobierno federal, quienes “pueden ser o no servidores públicos”, por lo que podrían ser empresarios o particulares.
Con esto, el gobierno priísta–pvemista obliga al Estado Mexicano a renunciar a su responsabilidad social en materia energética, pues CFE, como empresa rentable, sólo proporcionará fluido a quien pueda pagar.
“Entonces, si el gobierno y la CFE tienen más ingresos, ¿por qué ensañarse con la población encareciéndole los energéticos de mala calidad?: pues para consumar el “robo del siglo” mientras se generan otros espectáculos mediáticos y es en esa trampa en la que no debe caer la ciudadanía. Crean o no los priistas que ya perdieron el poder, hay que hacer que lo pierdan porque llevan al país al desastre. En el mejor de los casos, lo que prometen es demagogia”, concluyó el perredista.