El concierto del músico/Rodrigo Aridjis
Las alianzas de Mancera
El Jefe de Gobierno de la CDMX, Miguel Ángel Mancera, parece enviar una señal a sus simpatizantes y a los miembros del PRD, de su decisión a jugar las mismas reglas de su principal oponente de la izquierda, que es la de abanderar las causas legitimas de los sectores sociales abandonados por las burocracias partidistas y del gobierno federal.
Lo que podría ser considerado como normal en la vida de la Ciudad de México, la participación en el mitin de las agrupaciones campesinas del jefe de Gobierno de la Ciudad de México, y llamar a realizar una alianza con este sector para construir una nueva agenda para el campo mexicano, incorpora un nuevo elemento en su plataforma para su candidatura presidencial del 2018.
El Ejecutivo local, consigna el periódico La Jornada, invitado por las distintas agrupaciones campesinas que organizaron el acto, y donde se “comprometió a impulsar dicha alianza desde la capital del país”. En su discurso, mencionó que las políticas públicas que impulsa su administración para la zona rural de la ciudad, van desde apoyos a campesinos, vivienda y servicios de salud.
En el acto, los integrantes de la Coalición de Organizaciones Democráticas Urbanas y Campesinas “corearon el nombre del ejecutivo local, aunque también un grupo de integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se manifestó contra el mandatario capitalino”, dice La Jornada.
«Reconocemos que puede haber gente que no pueda estar de acuerdo con nosotros y les decimos que siempre está abierta la libertad de expresión», manifestó Mancera Espinosa ante los reclamos y rechiflas.
A pesar de las críticas severas de las agrupaciones empresariales por las afectaciones de las marchas callejeras en la CDMX, Mancera Espinosa se incorporó a la concentración minutos después de iniciado el mitin, por lo que, para dirigirse al templete, instalado frente a la Catedral metropolitana, tuvo que atravesar el Zócalo. Ahí se pronunció por el diálogo para resolver las diferencias, y como ejemplo recordó que hace unos días, la misma CNTE pudo manifestarte en el Primer Cuadro de la ciudad.
Mancera toca, sin mencionarlo, uno de los factores que ha generado el deterioro de la credibilidad de los partidos políticos en México, y es, precisamente, al abandono de sus bases sociales, organizaciones y grupos afines a su plataforma ideológica y programa de gobierno, a cambio de un pragmatismo y oportunismo con el único objetivo de conseguir los gobiernos de los diferentes niveles, y con ello la administración de recursos públicos, que ha generado el enriquecimiento de cuadros y dirigentes. Nada que no se sepa.
Sin embargo, basta ver las declaraciones patrimoniales de sus dirigentes –quienes aparentemente las han transparentado–, para ver sus fortunas personales que han amasado en un corto plazo, cuando sus orígenes de clase social, familiar y de ingresos, han sido modestos.
Estamos viendo en nuestro país un fenómeno que parecía inmanente de los regímenes populistas y de países con un sistema político altamente subdesarrollado, que jocosamente se les denominada como “Repúblicas Bananeras”, en las cuales el populismo y el nepotismo, forman parte habitual de sus gobiernos.
En el caso del nepotismo, tenemos un buen número de casos en los gobiernos delegacionales de la Ciudad de México, evidentemente del PRD, en los cuales sus administraciones públicas prácticamente se han convertido en sucesiones familiares.
Por ello, la participación del Jefe de Gobierno de la reciente marcha de protesta del Frente Auténtico del Campo (FAC) cuyos contingentes llenaron el Zócalo capitalino con motivo del 137 Aniversario del natalicio del campesino Emiliano Zapata, parece recordarle al PRD que la defensa de los movimientos sociales forman parte central de su agenda política, la cual fue abandonada, generando la migración de importantes grupos a partidos como Morena, que amenaza con quitarle el gobierno de la CDMX en el 2018.