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CIUDAD DE MÉXICO, 4 de septiembre de 2016.- En México millones de niñas, niños y adolescentes viven en la orfandad total, no sólo sin la presencia de sus padres, sino también sin el respaldo del gobierno, alertó el diputado federal del GPPRD, Rafael Hernández Soriano, quien demandó se cumplan de manera seria y verdadera los derechos de las niñas, niños y adolescentes en nuestro país.
A través de un comunicado, hizo un llamado urgente de alerta a las autoridades de la Secretaría del Trabajo y del Sistema Integral de Protección de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, para que se fortalezcan las políticas públicas dirigidas a la prevención y erradicación del trabajo infantil.
“Continúan siendo alarmantes para México las cifras que reporta el Módulo de Trabajo Infantil (MTI) 2015 dado a conocer en julio de este año por el INEGI y STPS, según las cuales casi 2.5 millones de niñas, niños y adolescentes laboran en ocupaciones “permitidas” (10 por ciento) y el restante 90 por ciento en actividades peligrosas (54 por ciento) y por debajo de la edad legalmente permitida (36 por ciento).
Hernández Soriano, quien es Secretario de la Comisión de los Derechos de la Niñez, destacó que según información de la Unesco, los motivos por los que trabajan las y los menores, además de los adolescentes, es para pagar sus estudios y sus propios gastos.
Destacó que según la información oficial, un millón 300 mil menores entre 5 y 17 años, trabaja realizando actividades al margen de la ley en condiciones peligrosas e insalubres que violentan sus derechos y que les puede producir efectos negativos para su salud física y desarrollo integral y sicológico.
El diputado perredista precisó que según información oficial, en México, 660 mil infantes son ocupados en actividades agropecuarias, 500 mil en el comercio, 560 mil en servicios, 300 mil en la industria y 150 mil en la construcción.
Afirmó que el trabajo infantil y su erradicación representa un enorme reto ya que es otra forma de explotación y violación sistemática de los derechos de niñas, niños y adolescentes que nadie puede permitir, particularmente desde el poder Ejecutivo y desde el Legislativo.
Por el contrario, apuntó el parlamentario, se requiere impulsar políticas públicas que atiendan el desarrollo de las niñas, niños y adolescentes, para generarles igualdad de oportunidades para su pleno desarrollo social, económico y puedan acceder a mayores niveles de educación.
Recordó que la Convención sobre los Derechos del Niño, ratificada por México hace 25 años, establece “el derecho de las niñas y niños a estar protegidos contra la explotación económica y contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su educación, o que sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social”.
Asimismo, apuntó que han sido importantes los esfuerzos normativos realizados en junio de 2014, desde el poder ejecutivo y legislativo como fue la reforma constitucional al Artículo 123 constitucional para elevar de 14 a 15 años la edad mínima para trabajar en México.