Juego de ojos
Cómo será la constitución de CDMX
De acuerdo con un anteproyecto de la Constitución de la Ciudad de México que empezará a regir en 2017, se da por hecho que el texto incluirá la revocación de mandato si el 5 por ciento de los electores votan, en su momento, a favor o bien si el 7.5 por ciento lo solicita con el requisito de su firma. La propuesta no está mal en caso de que así se considere en el documento que deberá presentar el próximo 15 de septiembre el actual Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinoza, quien si así se dispone y aprueba la Asamblea Constituyente sería, sin duda, el primero en ganarse esa solicitud ante tantos atropellos que se dan a diario contra los habitantes por parte de las autoridades capitalinas.
De igual forma, ha trascendido que en el contenido de la nueva constitución se contempla anular las elecciones en caso de irregularidades graves que violenten otros principios contenidos en la Carta Magna capitalina, lo que para los ciudadanos casi siempre sucede y, como prueba reciente, basta analizar los comicios del domingo pasado para la elección de los Comités Ciudadanos y la Consulta en torno del Presupuesto Participativo, proceso en el que se repitió el desinterés de los electores, el acarreo, fallas en el sistema, premios a cambio del voto y demás vicios que han caracterizado a los sufragios en este país desde que el PRI surgió como Partido Nacional Revolucionario en 1929, prácticas que han seguido todos los demás institutos políticos que han existido hasta ahora y que en la Ciudad de México domina el llamado Partido de la Revolución Democrática, que apoyó al propio Mancera a fin de que este llegara al poder.
El sitio en internet: “Pienso, luego voto” remitió al actuar en esta reciente jornada electoral, de la que muy pocos se enteraron, de los partidos políticos, los líderes sociales, los delegados y funcionarios del gobierno capitalino.
Por principio de cuentas cita que el Instituto Electoral del Distrito Federal estimó una participación de sólo el 11 por ciento del electorado y explica que esto obedeció a que si los ciudadanos no se enteraron de los comicios, mucho menos se conocía a quienes integraban las planillas. Eso sí, detalla, los partidos políticos tomaron ventaja de las vulnerabilidades sociales y se dedicaron a la entrega de tenis, despensa, tinacos y artículos de primera necesidad, entre personas de la tercera edad, ambulantes y ciudadanos con bajos ingresos.
Total, que se habla de, por ejemplo, imposición de los comités vecinales en las 64 colonias de la delegación Benito Juárez, que administra el Partido Acción Nacional. Pero igual se dio en otras demarcaciones, como Álvaro Obregón, Gustavo A. Madero, Iztacalco o Iztapalapa, que corresponden al PRD.
Todo esto es para ilustrar lo que es común en todo tipo de elecciones y que en el anteproyecto de Constitución de la Ciudad de México se pretende anular, cuando se sabe que en estas prácticas se hacen con el visto bueno de las autoridades electorales y sólo hay que remontarse a los comicios de 2015 en que legalmente arrasó MORENA y, sin embargo, su participación en la Asamblea Constituyente fue disminuida.
Según lo trascendido el anteproyecto consta de 76 artículos, a la vez de que consta de siete títulos que son: Principios Generales, Carta de Derechos, Desarrollo Sostenible de la Ciudad; la Ciudadanía y el Ejercicio Democrático, Distribución del Poder, La Buena Administración, Relación con los Poderes Federales y Estabilidad Constitucional. El caso es que mientras Mancera niega el anteproyecto y afirma que el verdadero contenido lo dará a conocer en el marco de los festejos por la Independencia Nacional, se deduce que la filtración fue a propósito para medir la reacción de los asambleístas constituyentes.
Por lo pronto, han criticado un exceso de regulación en los derechos que se pretenden garantizar, califican al texto de confuso en su redacción, que no va directo al ataque contra la corrupción, que se deja en la indefensión a los animales; hay quienes sostienen que proponer aumentar de 26 a 33 los diputados plurinominales es sólo una “ocurrencia”, que no se toca el verdadero problema del agua. Sin embargo, otros asambleístas no se cansan de elogiar el anteproyecto porque reconoce el matrimonio igualitario, los derechos sexuales, la no sanción el consumo de la marihuana, el acceso a internet, demás medios digitales y tecnologías de la información, la no discriminación y violencia a la población LGBTI y otras banderas aplaudidas por los perredistas, por lo que no es difícil asegurar que la filtración del mencionado anteproyecto surgió del mismo equipo del Jefe de Gobierno, lo que es bueno pues adelanta el “agarrón” o farsa que nos espera en lo que resta del año antes de ser aprobada la Constitución de la Ciudad de México.
Desde el Centro
Tras los estragos provocados por Donald Trump en México, y eso que todavía no hay elecciones en Estados Unidos, La Opinión de Los Ángeles informó que el senado mexicano, a través del legislador Armando Ríos Piter, prepara una iniciativa de ley para retener o decomisar bienes a alrededor de un millón de ciudadanos estadounidenses que viven en nuestro país. Esto en el caso de que el candidato republicano imponga gravámenes o detenga remesas de los migrantes mexicanos en caso de ganar la presidencia.