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CIUDAD DE MÉXICO, 14 de septiembre de 2016.- El Paquete Económico para el campo en el 2017 que envió el presidente Enrique Peña Nieto al Congreso, representa graves riesgos para la paz social del país, por lo que es necesario rediseñarlo con la participación de los poderes Ejecutivo y Legislativo, sin que el PRI, junto con el PV, quieran imponer su mayoría, señaló la diputada del GPPRD, Karina Barón, a través de un comunicado.
Propuso que en dicha aprobación participen con su opinión, organizaciones campesinas, sociales, técnicos y productores, a fin cambiar el modelo de política económica que se ha impuesto hasta ahora y que sólo ha beneficiado a los grandes monopolios nacionales y extranjeros.
Dijo que monopolios como Maseca, MiKarne, Bachoco y Bimbo, han sido beneficiados en los presupuestos pasados y, en esta ocasión, no ha sido la excepción, y de la misma manera, se vuelve a dejar en total indefensión a los pequeños productores.
La legisladora señaló que, de lo contrario, se corre un grave riesgo de levantamientos de grupos armados ante la falta de empleos, ausencia de productividad y de respuesta a las necesidades de las comunidades indígenas, además de que las grandes empresas agrícolas se aprovechan de las necesidades de los campesinos a quienes les pagan lo que se les da su gana por sus productos.
La diputada oaxaqueña manifestó que Peña Nieto debe sensibilizarse para garantizar en los hechos y no en el discurso, el derecho a la alimentación de todas y todos los mexicanos, y de manera paralela, se alcance la soberanía alimentaria porque el país tiene la capacidad territorial y humana para dicho propósito.
Afirmó que el PEF–2017, como lo propuso el Ejecutivo, va en detrimento de los campesinos del país, particularmente de los medianos y pequeños productores, ya que lo presupuestado para el año entrante los afectará seriamente, ya que los recursos disminuirán en alrededor de 22 mil millones de pesos, pasando de 84 mil millones de pesos en 2016 a 62 mil millones.
Finalmente. Indicó que los recortes que envió el Ejecutivo van a afectar muy seriamente a los campesinos, ya que en programas como el de Promete o el de Concurrencia no se les programó un solo peso, lo que va a afectar a las entidades federativas, cuyos gobiernos no podrán apoyar a sus grupos agrarios.