Avala Senado aplicar prisión preventiva a vinculados por extorsión
CIUDAD DE MÉXICO, 09 de octubre de 2016.- El coordinador del PRD en el Senado de la República, Miguel Barbosa Huerta, puso en duda el cumplimiento de las promesas hechas por los gobernadores entrantes en estados como Chihuahua o Veracruz.
Señaló que, frente al paquete económico de 2017 las condiciones económicas son difíciles y si no cumplen sus promesas de meter a sus antecesores a la cárcel podrían desencantar a la población que votó por ellos.
Sostuvo que el reto de estos mandatarios será demostrar que pueden hacer un mejor desempeño al de sus antecesores, pues la sociedad no les dará un bono de gracia que les dure seis años.
El líder del sol azteca precisó que frente a los recortes previstos en el Paquete Económico 2017, el reto para los nuevos gobernadores será demostrar desde el primer momento que pueden hacer un mejor desempeño y que son diferentes a las anteriores administraciones.
“La sociedad no les dará un bono de gracia que les dure seis años, la ciudadanía espera que su voto sirva para que las cosas cambien. Los nuevos gobernadores no tienen tiempo que perder”, dijo.
Al abundar que en las actuales condiciones económicas, sociales, de gobernabilidad e inseguridad del país, los gobernadores surgidos del proceso electoral del 5 de junio tienen la obligación de constituir gobiernos honestos, transparentes, austeros, combatir de manera real la corrupción y poner en marcha políticas públicas con alto contenido social.
“Hay hay enormes expectativas hacia los mandatarios de Aguascalientes, Chihuahua, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz y Zacatecas, de hacer una gestión diferente a la de sus predecesores.
“La mayoría del electorado de sus respectivas entidades los eligió como una forma de castigo a la corrupción, autoritarismo, negligencia e ineptitud de sus antecesores”, resaltó.
Al hacer notar que una de las principales promesas de varios de los nuevos mandatarios ha sido meter a la cárcel a quien antes detentaba el poder estatal, como es el caso de Veracruz y Chihuahua.
Recordó que el malestar social es mucho y el margen de maniobra para los gobiernos locales es estrecho.