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CIUDAD DE MÉXICO, 28 de octubre de 2016.- México no puede seguir siendo preso de la intolerancia de los sectores más reaccionarios de la derecha, aseveró el diputado federal Alejandro Ojeda Anguiano, quien promueve una iniciativa para reconocer que en México no solo existe un modelo de familia, sino pluralidad de familias y de ahí el respeto a los matrimonios igualitarios, promoviendo la adición de un séptimo párrafo al artículo 4° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
De acuerdo con un comunicado, luego de aseverar que ante cualquier culto religioso, debe prevalecer el Estado laico, el vicepresidente de la Cámara de Diputados aseguró que el Estado está obligado a proteger la diversidad de familias, reconociéndose la diversidad de género de sus integrantes independientemente de sus preferencias sexuales.
La iniciativa plantea: Las familias son el núcleo fundamental de la sociedad y se reconoce la diversidad de las mismas, originadas por género o preferencias sexuales, por lo que no se podrán coartar ni limitar derechos sociales, laborales, contractuales o cualesquiera otros, de sus integrantes, respetando siempre el principio de no discriminación establecido en la Constitución.
El diputado Ojeda expresó que la sociedad debe comprometerse a reconocer los derechos de este sector altamente vulnerable producto de la intolerancia, lo que lo hace objeto de violencia y crímenes de odio, pues según la organización Letra Ese, en su entrega más reciente, expuso que en México se contabilizaron mil 310 asesinatos por odio homofóbico entre 1995 y 2015.
Además, dijo, de acuerdo con el estudio Trans Respeto Versus Transfobia, México se encuentra a nivel mundial en el segundo lugar de asesinatos de personas trans, sumando 247 entre el 1 de enero de 2008 al 30 de abril de 2015.
El legislador del Partido de la Revolución Democrática (PRD) explicó que las familias son el elemento fundamental de la sociedad, en la que sus integrantes se unen de forma libre, para buscar cumplir objetivos comunes y proyectos de vida y ésta debe ser protegida por la sociedad y el Estado.
En este sentido, argumentó que debe reconocerse el derecho de las personas a fundar sus familias, respetando el principio de no discriminación establecido en la Constitución de la República.
El diputado federal Alejandro Ojeda dijo que con esta reforma se reconoce plenamente la diversidad de género de sus integrantes, independientemente de sus preferencias sexuales, por lo que no se podrán limitar derechos sociales, laborales, contractuales o cualesquiera otros por motivos de género.
“Diversidad de familias, son reconocidas como personas desde un enfoque de derechos humanos y no por un juicio de valor sobre su orientación sexual. De ahí la importancia y la necesidad de respetar la voluntad de unir afectos, esfuerzos y patrimonios, independientemente de la construcción de género o preferencias sexuales”, insistió.
Sostuvo que las familias pueden crearse por la unión libre de las personas o por matrimonio igualitario, el cual debe celebrarse con el libre y pleno consentimiento de los contrayentes, quienes deberán ser mayores de edad.
Declaró que el Estado deberá tomar las medidas apropiadas para asegurar la igualdad de derechos, independientemente de las preferencias sexuales y de género, así como la adecuada equivalencia de responsabilidades de los cónyuges en cuanto al matrimonio, durante el matrimonio y en caso de disolución del mismo.
Subrayó que las nuevas relaciones sociales no sólo se están integrando para procrear, sino que debe basarse en solidaridad y protección, por lo tanto, hablar de familias es hablar de amor y procuración mutua.
Por ello, insistió, la diversidad de familias en esencia es un derecho humano, ya que forma parte de los derechos relativos a la libertad de decidir.
Declaró que reconocer la diversidad de familias, lleva a reconocer libertades como el matrimonio igualitario, lo que ha permitido que otras formas de unión puedan establecerse, en las sociedades contemporáneas, de tal manera que el matrimonio igualitario, es un derecho humano que debemos reconocer.