Cerramos la etapa del institucionalismo neoliberal, considera Monreal
CIUDAD DE MÉXICO, 15 de noviembre de 2016.- El diputado Omar Ortega Álvarez calificó como una burla la oferta de recompensa de la Procuraduría General de la República (PGR) por información que conduzca a la detención del gobernador veracruzano con licencia y fuero, Javier Duarte de Ochoa.
Argumentó que los 15 millones de pesos prometidos de gratificación, como los 35 mil millones de pesos robados de la tesorería veracruzana por Duarte y sus cómplices –incluyendo su partido político–, los terminarán pagando la población y no los ladrones.
Demandó a la PGR poner a trabajar sus áreas de investigación y dar con el paradero del funcionario prófugo, que para ello tienen un presupuesto bastante abultado, pero además hacerlo con eficiencia y efectividad, pues con frecuencia incurre en fallas procesales que la convierten, quiéralo o no, en procuradora de impunidad y encubridora de delincuentes.
“Como con el caso Elba Esther Gordillo, en donde por sus errores se desestimó uno de los delitos por los que la maestra enfrenta a la justicia mexicana, lo mismo puede pasar con Duarte. Sus omisiones para desaforarlo en la Cámara de Diputados –es decir, por no hacer la solicitud correspondiente- puede llevar a que el gobernador prófugo eluda la justicia aunque lo atrapen, ya que alegaría que lo atraparon aún con fuero”, puntualizó.
Recordó que en su momento, el PRD pidió de manera oportuna y clara a la PGR que remitiera a la Cámara de Diputados la solicitud de procedencia e iniciara el proceso para retirar el fuero del cual aún goza Duarte, al tiempo que aplicara medidas necesarias para evitar su fuga.
Incluso él mismo presentó un punto de acuerdo –que parece “dormir el sueño de los justos”–, pero la Comisión de Justicia no lo ha dictaminado con la urgencia que merece.
Tanto se tardan la PGR y esta Comisión –ambas encabezadas por priistas-, que hasta Duarte de Ochoa se da el lujo de burlarse de la ciudadanía y ya quiere regresar a concluir su mandato.
Los priistas y pevemistas que tanto lo encubrieron en el Congreso de Veracruz–destacó Ortega Álvarez-– deberían permitírselo para que aparezca. Ante la incapacidad e incompetencia de la PGR, ésa parece la única forma en que lo atrapen.
Independientemente de ello, deben iniciar ya su desafuero, aunque no lo concluyan en los 15 días que le quedan de gestión. Sería el principio para el resto de juicios políticos y desafueros pendientes en la Cámara de Diputados y a los que tanto parecen temer priistas y pevemistas, en particular cuando estamos prácticamente en el “año de hidalgo” para los gobiernos de varios estados y el de la Federación.
“No se trata de buscar chivos expiatorios ni venganza política contra quien se ensañó con los municipios perredistas, pero tampoco de perdón y olvido ni del borrón y cuenta nueva: se trata de procurar justicia al pueblo de Veracruz, en particular a las víctimas y familiares de la violencia desatada en el estado, y esto incluye la reparación del daño”, dijo el líder del PRD en el Estado de México.
En tal sentido reiteró que el gobernador con licencia merece castigo, pero urge que él y sus cómplices -su partido y otros funcionarios- regresen lo robado, pues sus raterías son una de las causas por las cuales el presupuesto no alcanza y son la base para los pretextos argüidos para recortarlo.
Consideró un buen paso el aseguramiento de 112 cuentas bancarias, cinco empresas dedicadas a actividades diversas y cuatro propiedades de Duarte de Ochoa, pero confió en que no sea un “juego de artificio”.
Por el contrario, debe recuperarse realmente el gran monto de lo desfalcado y ponerlo a disposición del nuevo gobierno de Veracruz.
“En éste como en otros casos, es hora ya de que la PGR actúe con objetividad y celeridad. ¿Cuándo atraparán a Duarte? ¿Al iniciar las campañas del 2018? La población no está para más burlas”, concluyó.