Reforma judicial deja sin protección a periodistas: Jan Albert Hootsen
CIUDAD DE MÉXICO, 27 de enero de 2017.- La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) informó que en lo que va de 2017, ha verificado 90 plantas distribuidoras de gas de las cuales ocho han sido sancionadas con la imposición de 30 sellos de inmovilización a cilindros y pipas distribuidoras por no cumplir con el peso ofrecido o no contar con instrumentos de despacho bien calibrados.
Añadió en un comunicado que, en total ha aplicado 82 sanciones, ocho a plantas distribuidoras y 74 a camiones repartidores. Y las entidades en las que se han detectado mayor número de irregularidades son Jalisco, Ciudad de México, Estado de México, Tlaxcala, Guanajuato, Baja California Sur y Yucatán.
Añadió que, en el periodo comprendido entre el 23 y el 27 de enero, se realizaron 100 verificaciones adicionales a camiones distribuidores de cilindros de gas LP con lo que se llegó a 385 en lo que va del año, con 445 sellos de inmovilización colocados por irregularidades en el pesaje y condiciones de seguridad de los cilindros.
Destacó que, con la medida prácticamente duplicó el número de plantas gaseras revisadas con 44 verificaciones, que se suman a las 46 reportadas por el procurador, Ernesto Nemer Álvarez, el domingo pasado.
En los últimos días, dos empresas se negaron a la verificación por parte de Profeco, en cuyo caso se impusieron medidas de apremio por 250 mil pesos y se alistan denuncias penales por negarse a ser verificadas con base en el Artículo 253 Fracción III del Código Penal Federal, por la presunción de no entregar litros completos.
La sanción por este tipo penal puede alcanzar hasta 10 años de prisión y multas de hasta 8.2 millones de pesos.
En el caso de los cilindros de gas LP, revisa que el camión tenga colocados los precios a la vista, los cilindros pesen lo que se indica y cuenten con las condiciones de seguridad necesarias para su venta.
Cuando se trata de pipas destinadas a la venta para uso doméstico en tanques estacionarios, la Profeco verifica que se encuentre el precio a la vista y que los mecanismos de despacho estén debidamente calibrados.