Corrupción: un país de cínicos
La postulación de Emilio Álvarez–Icaza como aspirante presidencial independiente para 2018 abre otro flanco para intentar fortalecer la alianza de la derecha, que no ve un candidato fuerte para competirle a AMLO, ante lo anticlimática que ha resultado la precandidatura de Margarita Zavala que no pudo despegar ante un escenario nacional abiertamente anti-yanqui generada por la llegada de un iracundo antimexicano residente de la Casa Blanca.
Asimismo, la irrupción virulenta mediática del ex Presidente Calderón apoyado abiertamente por un diario que le publica hasta sus paseos en el supermercado, no son más que síntomas de una angustiosa campaña del grupo calderonista que ve cómo la ex Primera Dama no da el estirón en la víspera de la lucha electoral, como dicen los comentaristas deportivos.
Los estrategas del Cuarto de Guerra de Margarita Zavala, que evidentemente coordina el ex presidente Calderón, ha decidido llevar a su candidata a territorio norteamericano para seguir los pasos de Andrés Manuel López Obrador, del Jefe de Gobierno Miguel Mancera y del presidente del PAN, Ricardo Anaya, quien éste último, según las evaluaciones internas del panismo ha repuntado fuerte en los últimas semanas colocándolo por encima de Zavala.
Lo paradójico en la contienda interna del panismo es que la estrategia de rijosidad desarrollada por los Calderón en contra de López Obrador parece haber logrado reposicionar y beneficiar al joven dirigente nacional panista y dañar poco la imagen del candidato presidencial de Morena. O tal vez que los Calderón en realidad estén trabajando ya electoralmente para ayudar a Ricardo Anaya en sus aspiraciones presidenciales para el 2018. La poca animosidad que se percibe entre algunos integrantes de la oficina de campaña de Margarita Zavala deja ver que las cosas no marchan como esperaban.
Mientras tanto en el frente del PRD, según algunos amigos y colaboradores del Jefe de Gobierno de la CDMX, la definición del coordinador senatorial Miguel Barbosa de manifestar públicamente su apoyo al candidato presidencial de Morena, que se suma a la lista de otros senadores que abandonaron las filas perredistas, en realidad beneficia a las aspiraciones de Miguel Mancera, pues se libera de las rémoras en que se habían convertido muchos de ellos y que le dificultaban sus aspiraciones en el PRD.
La salida de personajes como Armando Ríos Piter, Zoé Robledo y otros senadores perredistas, dejan al Jefe de Gobierno con la puerta abierta para hacer su proyecto político presidencial como candidato del PRD y/ o negociar una alianza ventajosa para su futuro.
El Infierno: la obcecación de la SRE de encasillar la negociación con el gobierno norteamericano de Donald Trump fundamentalmente en la esfera económica y comercial, y dejar de lado los amplios caminos y recursos diplomáticos, no auguran mucho éxito en la defensa de los intereses nacionales.