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CAMBRIDGE, Massachusetts, 6 de abril de 2017.- «México enfrenta al menos tres crisis que urge resolver: la del sistema político, la de la política económica y la de la política social», señaló Ivonne Ortega Pacheco.
Al sustentar la ponencia El sueño mexicano: un nuevo modelo de desarrollo para México, ante estudiantes de la Universidad de Harvard, se añadió en un comunicado, la ex gobernadora de Yucatán indicó que es necesario combatir y superar esas crisis para recuperar la confianza de la gente en el sistema y así emprender acciones para que el desarrollo llegue a todos los mexicanos.
«El ‘sistema’ incluye al gobierno, cámaras, sindicatos, encuestadoras y todas las agrupaciones que han perdido representatividad porque la gente ya no deposita su confianza en ellas, lo que trae como consecuencia una falta de legitimidad de sus acciones», expuso.
En el caso de los partidos políticos, dijo, «hace falta democratizar la toma de decisiones, sobre todo las que definen sus candidaturas, para lo cual es necesario formalizar en la ley elecciones primarias abiertas a la militancia y a la ciudadanía en general».
Cuando los gobiernos no surgen de un consenso amplio de militancias, no existe un compromiso social porque el único compromiso es con quien o con quienes definen las candidaturas, lo que no solo los deslegitima sino que propicia la corrupción, afirmó.
Invitada por la Asociación de Estudiantes Mexicanos en Harvard (HUMAS), presidida por Sebastián Velasco, la también ex secretaria general del CEN del PRI expuso en la Escuela de Gobierno John F. Kennedy que las políticas económica y social del Estado mexicano atraviesan por sendas crisis, pues «no se requiere ser experto para saber que no funcionan».
Hace falta identificar efectivamente las vocaciones productivas de cada región del país, con el objetivo de concentrar los recursos para el desarrollo, y equilibrar el crecimiento, expuso.
Al conocer las cifras del crecimiento económico del país, agregó, «es claro que México sí sabe generar riqueza, lo que no hemos sabido hacer es distribuirla y no podemos hablar de desarrollo económico cuando la mitad de la población vive en la pobreza».
Enfatizó que la política social requiere cambiar su enfoque porque al iniciar la aplicación del modelo asistencial en 1988, aproximadamente 53 millones de mexicanos sufrían pobreza «y después de 29 años, cinco gobiernos y dos partidos en el poder, hoy tenemos en México más de 55 millones de pobres».
Y aseveró que México requiere un gran acuerdo social que surja de la discusión de estos problemas y del consenso para resolverlos, y se pronunció por llevar a ese acuerdo temas como la segunda vuelta electoral y las elecciones primarias obligatorias para todos los partidos, la eliminación total del fuero y la adopción de un modelo de comunicación política que privilegie la libertad de expresión, entre otros.