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CIUDAD DE MÉXICO,. 3 de junio de 2017.- El primer tomo de Patria, no es la historia de un personaje o de un gran país, se trata de serie de instantes cruciales y de una generación de liberales puros o rojos enfadados y avergonzados del México en el que vivían, así define Paco Ignacio Taibo II su más reciente libro de la terna que abarca el periodo de 1854 a 1867.
En entrevista con Quadratín México, Taibo revela que durante 20 años de investigación bibliográfica y documental se fue encontrando con una treintena de caudillos políticos y militares quienes fueron protagonistas de la lucha contra la dictadura de Santa Anna, artífices de la Constitución de 1857, figuras de la Guerra de Reforma, combatientes de la intervención anglo-franco-española.
Uno de los tantos descubrimientos al escribir Patria, que refiere su autor, es el origen provinciano y los distintos estratos de los cuales provenía la mayoría de miembros de la generación de liberales. Solo 4 son oriundos de la Ciudad de México mientras que 33 provienen del restos de la República.
Vicente Riva Palacio, Guillermo Prieto, Leandro Valle, José María Arteaga, son nacidos en la Ciudad de México, mientras que provienen de Michoacán, Manuel García Pueblita, Melchor Ocampo y Epitacio Huerta; de Oaxaca surgen Benito Juárez y Porfirio Díaz, de Guanajuato emergen Ignacio Ramírez, Sostenes Rocha, Florencio Antillón, Santos Degollado y Manuel Doblado, la lista también incluye próceres de Veracruz, Zacatecas, Guerrero, Nuevo León, Coahuila, Jalisco, Tamaulipas, Colima y Durango.
“Es azaroso, porque esperarías que el foco de la ilustración contra el santanismo se diera en la Universidad, en la Ciudad de México, entre los abogados, periodistas, etc. Y te das cuenta que la mayoría de los liberales sí actúa en la Ciudad de México pero tienen un origen provinciano con los oficios más humildes. El zacatecano Gonzáles Ortega era un tinterillo de un despacho de abogados; Ignacio Zaragoza era vendedor de ropa en una sastrería; Santos Degollado administrador de la Catedral de Morelia. Uno se va sorprendiendo con esta generación que va recogiendo lo mejor de todo el país”, refiere el también autor de las biografías de Francisco Villa y de Ernesto Guevara.
– ¿Cuál es el vinculo que une a toda esta generación de liberales?
-El gran motor del liberalismo puro, de la maquina que puso en marcha el movimiento de Reforma y la resistencia, fue la vergüenza, este país de mierda. La guerra contra Estados Unidos les pesa mucho, al igual que la manera en como Santana perdió esa guerra y Texas. Les da vergüenza ceder y que el Ejército le haga caso a un general derrotado. Rechazan el impudor, la corrupción, las prebendas y desigualdades de la sociedad.
Es una generación enfadada con el México en el cual están creciendo.
-¿Identificas algún Antonio López de Santa Anna contemporáneo?
-No hay Santa Annas contemporáneos, creo que él era más inteligente que todos los tarados que nos gobiernan, ni a Santa Anna llegan, a lo mejor pudieran ser sus mozos o cargadores de portafolios porque no dan para más. También hay una gran pobreza en la maldad, la cual se ha vuelto banal, como dice Hannah Arendt.
Los gobernantes suelen ser malos y pendejos simultáneamente, no hay el caballero (Miguel) Miramón, defensor de las causas religiosas, un hombre honesto, no tenemos un maligno (Leonardo) Márquez.
Los políticos actuales son banales y vulgares no dan para nada, La degradación de las cúpulas políticas priistas y panistas o la destrucción de la cúpula perredista, por acodamiento burocratización o falta de vergüenza no crea personajes potentes sino personajes mediocres o tristes.
Tinterillos, sastres, administradores e indígenas los liberales
Los retratos que realiza Paco Ignacio Taibo II de una treintena de liberales hacen entender una época crucial del siglo 19. Pero para él, tras dos décadas de investigación y más de 2 años dedicados a la escritura de Patria un aspecto a resaltar es la tenacidad que rodea a los rojos de la historia de México.
“Ese Santos Degollado que pierde 30 batallas. ¿Cómo puedes perder tantas batallas? eso quiere decir que perdiste y vuelves a empezar. Es decir, él reconstruye 29 veces el Ejército Liberal, entonces dices este cuate es milagroso.
Durante la guerra él era sastre de sus oficiales, en la noches cuando todo mundo estaba muerto de agotamiento después de larguísimas batallas y caminatas, les cosía las rupturas de los sacos o le ponía los botones a otros.
La manera en la que van coincidiendo, los Ejércitos revolucionarios en Querétaro, es la marcha de la miseria y de una tenacidad envidiable.
El propio Juárez, pese a sus talantes a veces autoritarios, es un hombre digno, de una rigidez sana en un país en crisis suprema, con una dosis de humildad interesantes. Juárez nunca tuvo escoltas ni como Gobernador o Presidente. Cuando era gobernador de Oaxaca pasaba por la plaza caminado.
Por ejemplo, en Veracruz en la casa donde estaba viviendo Juárez, una sirvienta negra se lo encuentra en la cocina. Y le dice: Indio pata rajada, sácate de aquí. Horas después lo ve sentado en la cabecera de la mesa, y pregunta ¿ese quién es? Y le dicen es el Presidente. Juárez se reía mucho de estas historias. Asumía su condición de indígena de una manera muy sana”, rememora el escritor.
Vacaciones de la historia de México y regreso a la novela policiaca
En un par de meses aparecerá el segundo tomo de Patria y en octubre estará disponible la tercera y última parte de la serie. Tras la inmersión en la historia de México el creador de la novela negra en español anuncia su regreso a este género.
¿Pendientes del siglo 19?
-No tengo pendientes del siglo 19, ninguno. Vacaciones, basta ya, De aquí me voy a la
novela. Esta batalla por la historia me consumió dos años y medio, y un montón de días de investigación. Vacaciones de la historia de México. Volveré algún día cuando encuentre un tema que guste y me caliente.
Vuelvo a la novela policiaca tengo tres historias empezadas, yo sé cuando las empiezo pero no cuando las termino.