Atacan casa del subsecretario de Seguridad de Solidaridad, Quintana Roo
CIUDAD DE MÉXICO, 21 de septiembre de 2017.- “¿Hay alguien ahí? ¿Me escuchan?”. Son las preguntas de la esperanza para encontrar sobrevivientes atrapados entre concreto, fierros retorcidos y vidrio.
Y sí hay, confirmaron brigadistas de las Fuerzas Armadas que continúan trabajando a marchas forzadas en el edificio derrumbado en la calle Ámsterdam y Laredo, de la colonia Condesa. Las próximas horas son cruciales.
En las últimas horas de este jueves se han recuperado dos personas. Suman seis. Las ambulancias y paramédicos están más que listos para auxiliar. Se escuchan gritos pidiendo medicamentos específicos.
Cadenas humanas siguen retirando el escombro con cubetas. Una neblina de polvo se hace presente, pero poco importa con tal de rescatar vidas humanas. No se pierden las expectativas de que así sea, aunque hayan pasado más de 50 horas de ocurrido el sismo que ensañó con el centro del país.
El olor a gas en algunas calles de los alrededores es perceptible. Está estrictamente prohibido fumar. Aunque poco les importó a un integrante de Protección Civil, así lo confirmaba su chaleco azul reflejante. Pronto varios le consignaron a apagar su cigarrillo, pues le faltó sentido común.