Suman 5 heridos por camión de pasajeros en camellón de juegos infantiles
CIUDAD DE MÉXICO, 4 de octubre de 2017.- El campamento de la zona cero de Álvaro Obregón comenzó a ser desmantelado, luego de que la madrugada de este miércoles se halló el último cuerpo que se buscaba en el edificio colapsado por el terremoto del 19 de septiembre.
En carretillas, hombres comenzaron a retirar cobijas y colchonetas dejadas por familiares que aguardaron el rescate de sus seres queridos durante 15 días. Cobijas, la mayoría esparcidas con cal, y lonas fueron subidas a un camión de la Agencia de Gestión Urbana (AGU) del gobierno capitalino, y fueron mezcladas con cubetas.
También las carpas comenzaron a ser desmontadas, una de ellas la de los familiares de las víctimas atrapadas, la que estaba al lado del parque donde el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación (Segob), Roberto Campa, y el enlace del gobierno de la Ciudad de México, Vicente Oñate, hacían sus conferencias. En dicha carpa había una cama de madera y varias bancas, donde pernoctaban y esperaban los familiares y eran informados por ambos funcionarios de los resultados de la labor rescatista. Dentro había una imagen de la Virgen de Guadalupe y un mensaje “en recuerdo de las víctimas, rescatistas y brigadistas voluntarios. Hombres y mujeres de buena voluntad que aportaron de su tiempo y recursos desinteresadamente del sismo del 19 de septiembre de 2017. México ha vivido, México seguirá viviendo. #FuerzaMéxico, base Cibeles”. La religión se convirtió en un refugio ante las horas de zozobra de quienes aguardaban que sus primos, amigos, novios, esposos, hijos fueran rescatados. Había varias imágenes religiosas y el sábado se vio a un voluntario entrar con una cruz de madera en la mano.